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Trama I [Grupo Errantes II]: Declaración de Guerra
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Trama I [Grupo Errantes II]: Declaración de Guerra
..::Leer antes de postear::..
- Nuestra anterior trama [salida de Sidney] queda oficialmente cerrada, sin embargo, dicha trama solo abarca 1 mes después de la trama global, por lo tanto queda 1 mes libre para que hagáis lo que crean conveniente con sus personajes [relacionarlos más, hacerlos más agresivos o blandos, etc].
- Los turnos de posteo son libres, pero se debe esperar al menos 1 primera ronda a que todos los miembros posteen [durante esta primera ronda se dará un máximo de 1 semana tras el último posteador, es decir, actualmente somos 6-7 en el grupo, si tras que el miembro 5-6 postee el ultimo no lo hace se proseguirá con el tema sin el].
- Los autos [los sitios en cómo van acomodados] son los mismos que la última trama, a excepción de Matt quien ha sido agregado y viajara en la autocaravana junto a Charlotte, John y Emily.
- Tres miembros han sido sacados del grupo definitivamente [Van, Noah y Ryan] por lo que se consideran muertos [no necesariamente lo están pero así los consideraremos nosotros]. En contraparte se ha agregado a Matt y se supone que ya lo conocemos de al menos 2 semanas, por tanto tomar eso en cuenta [igualmente Matt se encargara de justificar cosas en su post respecto a nosotros].
- Finalmente, se pide que todos inicien el tema en base a lo que yo daré como “entrada” a la misma trama.
Cuanto tiempo, cuanto camino, cuántas vidas perdidas y cuantas más recuperadas, el mundo definitivamente acabo, no hay nadie que vaya a venir para salvarnos, pero nosotros debemos seguir adelante, todos juntos, como lo prometimos antes de salir de Sidney. El camino se me ha hecho eterno, correr, matar, resistir, a eso nos hemos limitado, hemos perdido miembros, hemos visto caer a la gente, hemos visto ciudades arrasadas, la esperanza poco a poco se ha ido diluyendo, cada vez es más difícil confiar en la gente, hemos sido atacados por humanos, conocemos lo que esta locura puede crear en la gente, nos hemos defendido como cualquiera lo haría, pero también hemos conocido gente llena de luz, gente que aún cree en la posibilidad de ver el mundo renacer. Un movimiento brusco me hace reaccionar, estamos ya cerca de nuestro objetivo, un planetario ubicado en las montañas alejado de Adelaida y de cualquier otra zona urbana, ha sido una bendición que Bryd lo descubriese en uno de esos viejos mapas que encontramos en una estación de servicio, no obstante mes es difícil olvidar a Hansel y Marge, los dos amables ancianos que nos tendieron su granja para refugiarnos, pensé que finalmente habíamos encontrado un sitio para descansar, una granja cerca de Brisbane, tan apacible que imagine ahí lograríamos renacer nosotros mismos la civilización, claramente me equivoque.
Lo cierto es que no hay un lugar enteramente seguro, eso se acabó en este mundo, lo más que se puede pedir es un sitio que te proteja a un nivel muy alto, pero jamás encontraras un sitio completamente seguro. Los recuerdos de esa noche aún viven en mi cabeza, tres semanas sin una molestia, sin un solo caminante, incluso durante el transcurso de esa última semana nos habíamos encontrado con un errante, un viejo conocido, Matt…aunque al principio fue difícil terminamos aceptándolo, porque aceptémoslo, estar solo es sentencia de muerte y nosotros hemos sufrido muchas bajas, necesitamos gente en la cual confiar y apoyarnos, aunque un problema de estar en grupo en un sitio aparentemente seguro es que justo cuando bajas la guardia, aparece una horda de setenta caminantes, tomamos todas las cosas con rapidez y logramos subir la mayoría de los alimentos, pero por la misma razón los dos ancianos son mordidos y devorados posteriormente por los caminantes, nosotros logramos escapar y partir, el primer día viajamos sin rumbo, sin un objetivo definido, solo queríamos alejarnos de toda locura posible, pero eso nos llevó a encontrarnos con un grupo de pandilleros, no eran mercenarios pues no estaban bien armados ni entrenados, lamentablemente tuvimos que combatir y en consecuencia…matarlos.
Este es el nuevo mundo, matar a veces no es una opción sino una obligación, a veces es mejor golpear dos veces que esperar a que te golpeen una, todos en el grupo han terminado aceptándolo, al menos eso creo, todos quieren proteger a seres queridos o personas apreciadas, nos hemos vuelto una hermandad, todos cuidamos de todos, por eso seguimos vivos. Tras todo esto, finalmente con la vista alcanzo a ver nuestro objetivo, una carretera serpenteando un bosque en las montañas nos lleva hasta un planetario prácticamente oculto, no hay carteles que indiquen que esto existen, eso es una ventaja si no quieres ser encontrado. El viento demuestra que esta zona es gélida -a diferencia del clima habitual de Adelaida- por lo mismo debo colocarme una chamarra oscura, supongo que conseguir ropa fue un buen plan después de todo.
Los autos se detienen, nosotros en la camioneta frente a los demás -Bryd, Robin, Caelyn y yo- ordenamos que se apaguen los motores, estamos a cierta distancia del planetario, pero desde aquí se puede ver a todas luces la presencia de caminantes -Vaya…- bajo del auto y le ordeno a todos que me sigan, en la caravana -Charlotte, Matt, John y Emily- parecen entender lo que estoy diciendo a base de señas con la mano. Avanzo un poco revisando el bosque que nos rodea, aparentemente no hay caminantes, subir por esas laderas es prácticamente imposible y el frio no debe ayudar mucho a que vengan por aquí.
Me coloco cerca de un árbol, más allá está el estacionamiento del planetario, a la vista se ven cuando mínimo cuarenta caminantes -Son muchos caminantes- le refiero a todos los del grupo, paso una mano por mi cabeza, ahora nos enfrentamos a una decisión que puede ser crucial, este sitio es el más seguro que hemos podido encontrar, pero para tenerlo es visible que debemos erradicar a los caminantes, no sabemos cuántos pueda haber adentro, pero si no corremos el riesgo deberemos regresar y arriesgarnos a encontrar otro grupo que nos ataque. Tal vez hace meses mi decisión hubiese sido otra, pero me he fortalecido y he aprendido a confiar en la fuerza de todos los que me acompañan, ninguno de nosotros debe aceptar vivir otro día viajando con la incertidumbre, todos estamos cansados, pero debemos esforzarnos como siempre, necesitamos un sitio seguro y por tanto -Necesitamos tomar este sitio, sin distracciones, sin indecisiones, vamos a entrar ahí…y vamos a hacer nuestro el sitio, podemos hacerlo…unidos y yo, les prometo que nos encargaremos personalmente de exterminar a esa plaga- me volteo, esperando a los demás, es el momento de elegir, avanzar…o retroceder.
Leon O. Cole- Puntos de experiencia : 218
Fecha de inscripción : 20/09/2012
Re: Trama I [Grupo Errantes II]: Declaración de Guerra
Nada sale como yo quiero y seguramente nunca será así. Los recuerdos vienen a mi mente todas las noches o cada vez que no tengo nada qué hacer, de hecho, por eso siempre busco algo en qué entretenerme y que los recuerdos no alteren mis ánimos; muchas veces no me es posible, pero siempre trato de hacerlo. Luego de que Jack me rescatara y regresara con el grupo me mantuve inquieto, siempre con el deseo de ir en busca de mis padres, pero ellos tenían sus propios planes y no podían entretenerse con los míos, por eso es que luego de curarme el tobillo decidí irme otra vez, pero en esa ocasión fue menos dramática y no quise ocultarles mis razones, tal vez no fuera lo mejor, tal vez me equivocada y de haberlo sabido, seguro me habría quedado.
La travesía a Brisbane estuvo llena de conflictos, pero por suerte, ir solo también fue una ventaja, por lo que no tuve contratiempos y con mi espada pude defenderme bastante bien, de hecho, empecé a volverme más diestro con ella y a no depender de lleno de un arma de fuego, algo completamente bueno, desde mi punto de vista. Al llegar a la ciudad donde viví mucho años fui directo a la casa donde se supone podrían estar mis padres y hermano, la suerte no estuvo de mi lado, sólo encontré muerte y desolación; encontré a mis padres sin vida, sus cuerpos yacían inertes en la estancia, ella con un tiro en la cabeza y mi padre con la cabeza reventada, muy seguramente suicidio por la posición en que mantenía una escopeta entre sus manos. Al principio pensé que mi padre la habría asesinado, pero la bala que atravesó su cabeza era más pequeña que la de la escopeta en las manos del cuerpo de mi padre, fue un asunto muy intrigante.
Después de eso me perdí, no supe qué hacer, mis esperanzas se fueron abajo, a pesar de que mi hermano bien podría seguir con vida, mi búsqueda no tuvo más sentido y mis demás objetivos se fueron a la basura. Quise morir, no lo niego, pero no tuve el valor para atentar contra mí mismo. Salí de Brisbane unos días después, empecé a vagar sin rumbo, si meta, sin propósito alguno; hasta que llegué a la granja de Hansel y Marge, ellos, ancianos buenos y muy hospitalarios me ofrecieron un lugar dónde residir, al principio no me interesó, pero no me fui del lugar, me quedé y empecé a formar parte del pequeño grupo, o al menos así lo fue hasta que llegaron ellos, el grupo de Leon. A él le conocí unos meses atrás y por mera casualidad, un hecho que me valió ser reconocido.
Empecé a conocer a todos los miembros del grupo, todos me parecieron muy unidos y eso me hizo creer en ellos, lo que me condujo a la idea de seguirlos cuando los caminantes atacaron a la granja y una vez más la muerte rondó cerca de mí. No sé qué suerte tengo, pero ninguno de esos caminantes logró ser un problema y salí ileso, no así quienes nos tendieron la mano. Los anciano murieron muy a nuestro pesar, sobre todo mío, pues los veía como un ángeles; al final no tuve más opción que seguir al grupo, convertirme en parte de ellos fue obligatorio, pero no por ello perdía el sentido de respeto. Tuve complicaciones, claro, no se puede confiar en alguien tan fácilmente y mi estado ya no era como antes, ahora parecía menos entusiasmado y con un aire muy negativo, aunque firme, terminé aceptando que todos estamos condenados a muerte.
Ahora que todo es más hostil la decisión de encontrar un lugar seguro se volvió como una obsesión y cuando al fin lo teníamos, un grupo de muertos vivientes se cruzó en nuestro camino, típico. Ahora, cerca de Adelaida, nos hemos propuesto conquistar un observatorio y hacerlo nuestro cuartel, yo no me opuse, no tendría por qué hacerlo, así que sólo me dediqué al apoyo incondicional, a hacer lo que se me ordene, porque los objetivos propios han dejado de existir. De algún modo empecé a admirar a Leon, tal vez eso debí hacer con Jack, pero jamás llegué a respetarlo como el líder que en verdad fue para el grupo, hay muchas cosas de las que me arrepiento. Llegamos hasta el lugar, Leon nos ordenó a través de señas tomar posiciones.
-Son suficiente para cada uno. –respondí a las palabras del líder, tomando mi espada con fuerza y listo para enfrentarme a ellos. Mis ojos se centraron entonces en el objetivo, de un momento a otro parecieron más inquietos, lo que demostró que ya nos habían detectado, así que técnicamente no hay marcha atrás, a menos que queramos rendirnos. Las siguientes palabras de Leon fueron bastante motivadoras, un hecho que le valió mayor admiración de mi parte, por eso es que afiancé aún más mi espada y asentí con seguridad; le miré con plena convicción, seguro de lo que hacía y decía, pues planeo demostrar que soy de confianza y que estoy dispuesto a dar todo por el grupo, sin importar lo que se venga encima. Avanzaría con ellos hasta el fin de todo.
La travesía a Brisbane estuvo llena de conflictos, pero por suerte, ir solo también fue una ventaja, por lo que no tuve contratiempos y con mi espada pude defenderme bastante bien, de hecho, empecé a volverme más diestro con ella y a no depender de lleno de un arma de fuego, algo completamente bueno, desde mi punto de vista. Al llegar a la ciudad donde viví mucho años fui directo a la casa donde se supone podrían estar mis padres y hermano, la suerte no estuvo de mi lado, sólo encontré muerte y desolación; encontré a mis padres sin vida, sus cuerpos yacían inertes en la estancia, ella con un tiro en la cabeza y mi padre con la cabeza reventada, muy seguramente suicidio por la posición en que mantenía una escopeta entre sus manos. Al principio pensé que mi padre la habría asesinado, pero la bala que atravesó su cabeza era más pequeña que la de la escopeta en las manos del cuerpo de mi padre, fue un asunto muy intrigante.
Después de eso me perdí, no supe qué hacer, mis esperanzas se fueron abajo, a pesar de que mi hermano bien podría seguir con vida, mi búsqueda no tuvo más sentido y mis demás objetivos se fueron a la basura. Quise morir, no lo niego, pero no tuve el valor para atentar contra mí mismo. Salí de Brisbane unos días después, empecé a vagar sin rumbo, si meta, sin propósito alguno; hasta que llegué a la granja de Hansel y Marge, ellos, ancianos buenos y muy hospitalarios me ofrecieron un lugar dónde residir, al principio no me interesó, pero no me fui del lugar, me quedé y empecé a formar parte del pequeño grupo, o al menos así lo fue hasta que llegaron ellos, el grupo de Leon. A él le conocí unos meses atrás y por mera casualidad, un hecho que me valió ser reconocido.
Empecé a conocer a todos los miembros del grupo, todos me parecieron muy unidos y eso me hizo creer en ellos, lo que me condujo a la idea de seguirlos cuando los caminantes atacaron a la granja y una vez más la muerte rondó cerca de mí. No sé qué suerte tengo, pero ninguno de esos caminantes logró ser un problema y salí ileso, no así quienes nos tendieron la mano. Los anciano murieron muy a nuestro pesar, sobre todo mío, pues los veía como un ángeles; al final no tuve más opción que seguir al grupo, convertirme en parte de ellos fue obligatorio, pero no por ello perdía el sentido de respeto. Tuve complicaciones, claro, no se puede confiar en alguien tan fácilmente y mi estado ya no era como antes, ahora parecía menos entusiasmado y con un aire muy negativo, aunque firme, terminé aceptando que todos estamos condenados a muerte.
Ahora que todo es más hostil la decisión de encontrar un lugar seguro se volvió como una obsesión y cuando al fin lo teníamos, un grupo de muertos vivientes se cruzó en nuestro camino, típico. Ahora, cerca de Adelaida, nos hemos propuesto conquistar un observatorio y hacerlo nuestro cuartel, yo no me opuse, no tendría por qué hacerlo, así que sólo me dediqué al apoyo incondicional, a hacer lo que se me ordene, porque los objetivos propios han dejado de existir. De algún modo empecé a admirar a Leon, tal vez eso debí hacer con Jack, pero jamás llegué a respetarlo como el líder que en verdad fue para el grupo, hay muchas cosas de las que me arrepiento. Llegamos hasta el lugar, Leon nos ordenó a través de señas tomar posiciones.
-Son suficiente para cada uno. –respondí a las palabras del líder, tomando mi espada con fuerza y listo para enfrentarme a ellos. Mis ojos se centraron entonces en el objetivo, de un momento a otro parecieron más inquietos, lo que demostró que ya nos habían detectado, así que técnicamente no hay marcha atrás, a menos que queramos rendirnos. Las siguientes palabras de Leon fueron bastante motivadoras, un hecho que le valió mayor admiración de mi parte, por eso es que afiancé aún más mi espada y asentí con seguridad; le miré con plena convicción, seguro de lo que hacía y decía, pues planeo demostrar que soy de confianza y que estoy dispuesto a dar todo por el grupo, sin importar lo que se venga encima. Avanzaría con ellos hasta el fin de todo.
Matt J. Sanders- Puntos de experiencia : 176
Fecha de inscripción : 26/10/2012
Edad : 33
Localización : Aquí y allá
Re: Trama I [Grupo Errantes II]: Declaración de Guerra
Para ayudar en la descripción de los post de todos les dejo la ubicación del planetario de Adelaida. Sir Thomas Brisbane Planetarium
Ver mapa más grande
Si le dan en Earth podrán ver imágenes vía satélite del lugar y hacer un pequeño recorrido, todo es para ayuda de los post ^^
Y el tiempo continuaba avanzando a pesar de que el mundo ya se había acabado. No había mucho por el cual pelear, el trabajo y los horarios, todo era cosa del pasado. Ahora el tiempo era lo que menos importaba. Es en si algo gracioso pensar que antes lo que regía a muchos era el tiempo puesto que todas nuestras actividades eran basadas simplemente en eso; Horas, minutos, segundos, cada una de esas medidas fue inventada para tener controlada nuestra vida.. Pero ahora eso es lo que menos importa, en si, es lo que menos quiero saber y estoy segura que no soy la única, pues cada minuto que pasa es un minuto lejos de aquel mundo que conocí donde la vida reinaba.
Pareciera que cada que logramos encontrar una cercanía a nuestro antiguo mundo, la muerte nos siguiera haciendo que caigamos en la realidad. Tan duro y cruel es el golpe... Aveces quisiera solo olvidar todo.
Recuerdo cuando llegamos a aquel lugar, una granja con tres habitantes; una pareja de ancianos tan gentiles que llegaron a recordarme a mis abuelos... Y un chico que Leon decía que conocía... Cosa extraña quizás pues con el paso del tiempo y nuestra vida en aquella granja los lazos con él se hicieron algo fuertes haciendo que al final también fueran parte de "la familia". Aún los recuerdo a ellos dos, tan amorosos, a que aún en su ancianidad se amaban y creían en un futuro, tenían esperanza cosa que ya había perdido un poco... La verdad es que no sabía que me había pasado, Leon se veía fuerte por la familia y yo a su lado como su esposa aparentaba lo mismo, pero nunca logré confesarle que por las noches lloraba simplemente por miedo. Era algo que no podía explicar, y que solo Marge y Charlotte sabían, pues quizás eran las que más me conocían. Con Emy.. Intentaba ser fuerte a su lado, no quería que ella se viera afectada por mis pensamientos y más cuando no pudimos hallar pista de su hermano y con Robin era lo mismo con su prometido.
Era difícil para mi ocultar estos sentimientos de soledad y miedo ante aquel que ahora era mi esposo, aunque seguro que él lo intuía, pero solo lo negaba, suficiente tenía con preocuparse por los demás para cargar con algo tan pequeño como lo mio. Aunque hablando de eso aveces también tenía algo de celos por la familia... Es decir Leon pasaba todo el tiempo de un lado a otro supervisando todo, viendo que todos estén bien, como siempre lo ha hecho... Y eso aveces me dejaba menos tiempo con él, incluso, aveces solo lo veía por las tardes antes de dormir y después me adelantaba a descansar pues casi siempre a él le gustaba tomar la primera ronda de vigilancia por lo cual nunca lo veía hasta la mañana siguiente. Era verdad que el tiempo tenía que compartirlo con la familia pero tampoco podía ser exigente y menos una molestia, quizás por eso aprendí a ocultar aquel sentir ante Leon.
Pero a pesar de comenzar a acostumbrarme llevando una rutina como aveces hacía en el antiguo mundo, la desgracia nos alcanzo, pues como era de esperarse los caminantes dieron con nosotros. De un momento a otro la tranquila granja en la que estábamos alojados se llenó de caminantes de un lado a otro. Al ver esto y notar que nuestras armas no serían suficientes para atacarlos decidimos huir a como diera lugar. Los vehículos por suerte estaban preparados para cualquier emergencia, e incluso, teníamos algunos alimentos guardados en la autocaravana ya que en ella había más espacio.
Todos corrimos y yo intenté ayudar a Marge a avanzar al vehículo más cercano, pero en ese momento una de esas cosas me la arrebato. Al sentir el jalón volteé a ver que pasaba y logré verla siento retenida por dos caminantes que la mordían por el cuello. Grité horrorizada intentando salvarla a pesar de todo jalando un poco su mano mientras seguía gritando; uno de esos caminantes al verme intentó ir por mi pero Leon lo golpeó y me sujeto para casi cargarme obligándome a soltar a Marge mientras veía en sus ojos el miedo y el dolor que le provocaban esas cosas al morderla incesantemente. Entonces un balazo resonó en la granja y como último vi a Marge desplomarse en el suelo mientras en su frente brotaba sangre. No supe quién disparo pero al menos se que lo que hizo lo hizo por compasión, estaba segura que tanto como Marge y su esposo no hubieran querido ser caminantes... Lo estaba y al menos alguien de nosotros se compadeció para dejarlos ir antes de que esas bestias acabaran con ellos y los volvieran parte de las filas de caminantes que existían en el mundo.
Leon al final me obligo a subir al coche mientras Robin conducía y Loki se colocaba como el copiloto. Ahí mi mente se perdió por un momento... Otra vez el tiempo transcurrió sin que me diera cuenta, solo recuerdo quedarme viendo hacia la ventanilla por un largo lapso aunque no se cuanto pasé así; Quizás un día o dos, pero al final acepte su muerte y acepte el hecho de que debía acostumbrarme a ello, a que la muerte me rodeara.
Cuando me sentí mejor le pedí a Robin tomar el volante pues quedarme solo así mirando a la nada me hacía más daño que intentar poner mi mente en otra cosa, aunque gracias a eso fue como logré encontrar un cartel hacia un observatorio "Sir Thomas Brisbane" Quien diría que al final esa sería la solución.
Así que al final logramos tener un camino al cual ir, pareciera que la fortuna nos sonreía nuevamente aunque esperaba que esta vez se quedara más tiempo con nosotros y que no fuera tan efímera como aveces era.
El día que llegamos a las cercanías del observatorio me di cuenta que estaba sobre montaña por lo cual eso beneficiaba mucho, no había muchas construcciones por ahí cerca, solo vegetación de la cual destacaban grandes árboles de alturas superiores a los 5 m; Al llegar Leon nos dio ordenes de bajar para saber como entraríamos, pues a pesar de estar desolado había caminantes a sus alrededores. Cuando bajé del auto de un momento a otro comencé a sentirme algo mareada, cosa extraña, pero que relacioné con el cambio de altura. Como estábamos en terreno alto, quizás eso me provocaba estar en ese estado, aunque no le tomé mucha importancia e intenté caminar normal. Hacía frío y yo me coloqué una chamarra térmica color verde fuerte, casi del mismo color que el follaje de los árboles. Avancé y recargándome en el tronco de un árbol -intentando disimular el mareo- Escuché con atención las palabras de Leon y luego las de Matt — Adelante chicos... Hagamoslo. — Mencioné intentando de dar ánimos a todos mientras preparaba mis armas para estar lista a lo que viniera más adelante.
Audrey O'Brien- Puntos de experiencia : 241
Fecha de inscripción : 20/09/2012
Localización : Sydney
Re: Trama I [Grupo Errantes II]: Declaración de Guerra
Las noches que despertaba esperando que lo vivido fuera un sueño, las mañanas esperando ver a esa persona a mi lado habían quedado atrás hacía tiempo; no recuerdo exactamente cuándo, solo pasó, me había resignado a su pérdida intentando ser lo más realista posible. Ya habían pasado varios días que no lo mencionaba ante las personas que ahora eran mi familia, ellos tampoco lo hacían, supongo que habían notado mi decisión y no lo querían hacer difícil para mí, o tal vez, simplemente lo habían olvidado como yo me esforzaba por hacer. Aun así con sus respectivas dificultades logré aclimatarme y convivir con relativa tranquilidad, lo cual fue más fácil cuando llegamos a aquella granja.
Era un lugar alejado de la civilización y por consecuencia de los caminantes, nos recibieron 3 personas; Marge y Hansel, una pareja de ancianos dueños de la granja y Matt un hombre más joven que al principio pensé que era hijo de ellos, después me enteré que era un conocido de Leon. Ese lugar se convirtió en un pequeño paraíso; todos nos ayudábamos con los quehaceres requeridos, comíamos comida caliente preparada con la ayuda de la amable Marge, miraba a Loki correr por el campo abierto y yo sonreía más seguido que en el pasado. Es una lástima que todo tuviera un fin, aunque lo que más me afectó fue que terminara de la manera en que sucedió.
De un momento a otro, una horda enorme de caminantes que nadie se esperaba. Todo se convirtió en un caos. Corrí con un hacha en una mano, el revolver en la otra y lo que logré rescatar en una mochila a mi espalda; con Loki corriendo delante de mí, daba tajadas mientras trataba de llegar a los vehículos tal como Leon había indicado, estaba a punto de hacerlo cuando escuché la voz angustiante de Marge en un grito que me heló la sangre durante un instante en el que vi como su cuerpo era arrebatado de la mano de Audrey y devorado por un grupo de aquellas bestias. Hansel estaba a su lado, trataba de alejar a los caminantes de su esposa mientras él mismo era devorado también. Mis manos temblaron, guardé el hacha en mi cinturón y sostuve el revolver con ambas manos. Una plática que tuve con la pareja una madrugada en que no había logrado dormir vino a mi mente como un relámpago, “No pierdas la esperanza, ten fe” sus palabras retumbaron en mi cabeza y se repitieron a la vez que apuntaba en dirección a la cabeza de Marge. Disparé. Apunté a la cabeza de Hansel y volví a disparar.
Entonces no supe cómo logré llegar al automóvil, fui la primera en hacerlo así que tomé el asiento del conductor, momentos después llegaron Leon y Audrey, entonces me puse en marcha sin decir más. Nadie lo hizo. No supe exactamente durante cuánto tiempo conduje ni por dónde lo hice; mis ojos ardían y sentía un nudo en la garganta pero no lloré en lo absoluto, entonces Audrey decidió tomar el volante, yo solo asentí con la cabeza, me pasé al lado del copiloto y Loki se recostó a mis pies. Continué el camino mirando por la ventanilla, hasta que de momento a otro mis ojos se cerraron y me quedé dormida.
Tiempo después desperté, la temperatura había bajado así que me puse una chaqueta de mezclilla algo grande y desgastada pero cuyo interior era bastante abrigador. Miré a Audrey quien tenía un mapa cerca de ella, entonces me informó del lugar a donde nos dirigíamos, acepté sin más. Minutos después llegamos a un lugar apartado rodeado de árboles, un planetario. Leon bajó del auto primero, al regresar nos puso al tanto de la situación en que nos encontrábamos. Tomé el revólver, abrí el cargador y observé los dos espacios vacíos de las únicas dos balas que había disparado con anterioridad, los recargué con dos municiones nuevas. En el auto estaba también el hacha de aquella vez en el hospital que aun llevaba conmigo y la tomé con fuerza en mi mano derecha. Escuché atenta las palabras de Leon. –Estoy contigo, podemos hacerlo. – Había seriedad y decisión en mi mirada, escuché entonces a Loki gruñir, al parecer él también estaba de acuerdo.
Era un lugar alejado de la civilización y por consecuencia de los caminantes, nos recibieron 3 personas; Marge y Hansel, una pareja de ancianos dueños de la granja y Matt un hombre más joven que al principio pensé que era hijo de ellos, después me enteré que era un conocido de Leon. Ese lugar se convirtió en un pequeño paraíso; todos nos ayudábamos con los quehaceres requeridos, comíamos comida caliente preparada con la ayuda de la amable Marge, miraba a Loki correr por el campo abierto y yo sonreía más seguido que en el pasado. Es una lástima que todo tuviera un fin, aunque lo que más me afectó fue que terminara de la manera en que sucedió.
De un momento a otro, una horda enorme de caminantes que nadie se esperaba. Todo se convirtió en un caos. Corrí con un hacha en una mano, el revolver en la otra y lo que logré rescatar en una mochila a mi espalda; con Loki corriendo delante de mí, daba tajadas mientras trataba de llegar a los vehículos tal como Leon había indicado, estaba a punto de hacerlo cuando escuché la voz angustiante de Marge en un grito que me heló la sangre durante un instante en el que vi como su cuerpo era arrebatado de la mano de Audrey y devorado por un grupo de aquellas bestias. Hansel estaba a su lado, trataba de alejar a los caminantes de su esposa mientras él mismo era devorado también. Mis manos temblaron, guardé el hacha en mi cinturón y sostuve el revolver con ambas manos. Una plática que tuve con la pareja una madrugada en que no había logrado dormir vino a mi mente como un relámpago, “No pierdas la esperanza, ten fe” sus palabras retumbaron en mi cabeza y se repitieron a la vez que apuntaba en dirección a la cabeza de Marge. Disparé. Apunté a la cabeza de Hansel y volví a disparar.
Entonces no supe cómo logré llegar al automóvil, fui la primera en hacerlo así que tomé el asiento del conductor, momentos después llegaron Leon y Audrey, entonces me puse en marcha sin decir más. Nadie lo hizo. No supe exactamente durante cuánto tiempo conduje ni por dónde lo hice; mis ojos ardían y sentía un nudo en la garganta pero no lloré en lo absoluto, entonces Audrey decidió tomar el volante, yo solo asentí con la cabeza, me pasé al lado del copiloto y Loki se recostó a mis pies. Continué el camino mirando por la ventanilla, hasta que de momento a otro mis ojos se cerraron y me quedé dormida.
Tiempo después desperté, la temperatura había bajado así que me puse una chaqueta de mezclilla algo grande y desgastada pero cuyo interior era bastante abrigador. Miré a Audrey quien tenía un mapa cerca de ella, entonces me informó del lugar a donde nos dirigíamos, acepté sin más. Minutos después llegamos a un lugar apartado rodeado de árboles, un planetario. Leon bajó del auto primero, al regresar nos puso al tanto de la situación en que nos encontrábamos. Tomé el revólver, abrí el cargador y observé los dos espacios vacíos de las únicas dos balas que había disparado con anterioridad, los recargué con dos municiones nuevas. En el auto estaba también el hacha de aquella vez en el hospital que aun llevaba conmigo y la tomé con fuerza en mi mano derecha. Escuché atenta las palabras de Leon. –Estoy contigo, podemos hacerlo. – Había seriedad y decisión en mi mirada, escuché entonces a Loki gruñir, al parecer él también estaba de acuerdo.
Robin Darcy- Puntos de experiencia : 249
Fecha de inscripción : 21/09/2012
Re: Trama I [Grupo Errantes II]: Declaración de Guerra
Cuanto tiempo había pasado ya, tanto que ni si quiera sabía que día era pues había otras cosas por las cuales preocuparse, muchas cosas habían pasado en este tiempo, mi relación con Emily ahora era mas cercana, nunca pudimos encontrar a su hermano al igual que a mi amigo Van, estuvimos viviendo un tiempo en una granja la cual pertenecía a una pareja de ancianos los cuales fueron muy amables con nosotros.
En esta dicha granja también estaba un amigo de Leon el cual se llamaba Matt y quien, después de discutir un tiempo con los miembros de nuestra familia, lo aceptamos y por hoy ya es parte de nosotros. Durante aproximadamente tres semanas estuvimos tranquilos en nuestro nuevo hogar, ningún caminante se había acercado, los ancianos eran buenos anfitriones con nosotros y por un momento creí que por fin podríamos salir adelante sin ninguna preocupación, lamentablemente no fue así pues una noche mientras yo estaba tratando de descansar un poco se comenzaron a escuchar ruidos y los horribles gemidos a los cuales ya me había desacostumbrado, mire por la ventana y ahí estaban una horda de caminantes dispuestos a devorarnos, tomé mi ballesta y mis cosas mas ligeras para poder escapar pues eran demasiados y era seguro que si permanecíamos ahí terminaríamos muertos. Tomé de la mano a Emily y corrí hacía la auto-caravana, cuando estaba apunto de entrar volví mi cabeza pues recordé a Hansel y Marge, los ancianos que me recordaron a mis padres ya estaban siendo devorados, maldije en mi mente y después de ver que Robin termino con su sufrimiento subí a la auto-caravana con Emily.
Después de esa noche vagamos sin rumbo por un par de días hasta que nos avisaron de un nuevo destino un planetario llamado "Sir Thomas Brisbane". Nos dirigimos a ese lugar y cuando llegamos note que Leon bajo del auto y nos dio señas de que lo siguiéramos así que baje de la auto-caravana con la ballesta en mano, al parecer donde estábamos no había caminantes, unos paso después llegamos a un punto donde se veía el estacionamiento del planetario, y si ahí estaba el planetario pero en el estacionamiento al menos cuarenta caminantes, la situación era peligrosa pero Leon después de pensarlo nos mencionó que era necesario tomar el lugar y que nos arriesgaríamos de nueva cuenta para obtenerlo, por un momento me preocupe pues el hecho de estar tranquilos en la granja me hizo olvidar que solo me quedaba la mitad de municiones para mi ballesta y por el ataque de los caminantes ya no tuve tiempo de conseguir más, además nunca pude recuperarme completamente del ataque en las colinas, aun estaba resentido de algunas partes de mi cuerpo, sin importar eso no mencioné nada pues no quería causar problemas tan solo acepte la misión como siempre lo hago -Bien, terminemos con esos estúpidos caminantes para tener un lugar donde hospedarnos.
En esta dicha granja también estaba un amigo de Leon el cual se llamaba Matt y quien, después de discutir un tiempo con los miembros de nuestra familia, lo aceptamos y por hoy ya es parte de nosotros. Durante aproximadamente tres semanas estuvimos tranquilos en nuestro nuevo hogar, ningún caminante se había acercado, los ancianos eran buenos anfitriones con nosotros y por un momento creí que por fin podríamos salir adelante sin ninguna preocupación, lamentablemente no fue así pues una noche mientras yo estaba tratando de descansar un poco se comenzaron a escuchar ruidos y los horribles gemidos a los cuales ya me había desacostumbrado, mire por la ventana y ahí estaban una horda de caminantes dispuestos a devorarnos, tomé mi ballesta y mis cosas mas ligeras para poder escapar pues eran demasiados y era seguro que si permanecíamos ahí terminaríamos muertos. Tomé de la mano a Emily y corrí hacía la auto-caravana, cuando estaba apunto de entrar volví mi cabeza pues recordé a Hansel y Marge, los ancianos que me recordaron a mis padres ya estaban siendo devorados, maldije en mi mente y después de ver que Robin termino con su sufrimiento subí a la auto-caravana con Emily.
Después de esa noche vagamos sin rumbo por un par de días hasta que nos avisaron de un nuevo destino un planetario llamado "Sir Thomas Brisbane". Nos dirigimos a ese lugar y cuando llegamos note que Leon bajo del auto y nos dio señas de que lo siguiéramos así que baje de la auto-caravana con la ballesta en mano, al parecer donde estábamos no había caminantes, unos paso después llegamos a un punto donde se veía el estacionamiento del planetario, y si ahí estaba el planetario pero en el estacionamiento al menos cuarenta caminantes, la situación era peligrosa pero Leon después de pensarlo nos mencionó que era necesario tomar el lugar y que nos arriesgaríamos de nueva cuenta para obtenerlo, por un momento me preocupe pues el hecho de estar tranquilos en la granja me hizo olvidar que solo me quedaba la mitad de municiones para mi ballesta y por el ataque de los caminantes ya no tuve tiempo de conseguir más, además nunca pude recuperarme completamente del ataque en las colinas, aun estaba resentido de algunas partes de mi cuerpo, sin importar eso no mencioné nada pues no quería causar problemas tan solo acepte la misión como siempre lo hago -Bien, terminemos con esos estúpidos caminantes para tener un lugar donde hospedarnos.
John Taylor- Puntos de experiencia : 73
Fecha de inscripción : 21/09/2012
Re: Trama I [Grupo Errantes II]: Declaración de Guerra
¿Hasta cuando no terminaría esto?, es decir, de alguna forma luego de dejar a la muchacha atrás en la carretera mientras íbamos hacia los coches y nos marchamos luego de que viéramos una turba de esas cosas caminar con pasos casi acelerados dispuestas a atacarnos pero nosotros fuimos mas rápidos y nos alejamos lo suficiente para cuando yo me volví hacia atrás eran solo unos puntos los cuales cada vez se iban alejando mas, relajándome ahora apoyando la cabeza en el hombro de John quien de alguna forma se había convertido en alguien muy importante para mi.
Luego nos comenzamos a hospedar en una granja donde de forma amable dos ancianitos nos dejaron quedarnos por algún tiempo y las cosas fueron relativamente normales ya que allí pudimos relajarnos al vernos presionados de la ciudad misma donde los zombies eran los amos y señores del lugar por lo que allí intente practicar con mi pistola ya que no quería ser una chica débil, como me consideraba dentro del grupo ante mi ineficiencia de poder matar a alguien y cuando lo hacia parecía a mi parecer una cobarde llorando a mares luego.Suspire y casi siempre andaba para todas las partes con John el cual siempre me ayudaba y apoyaba en todas las situaciones haciéndome sentir realmente segura y confiada conmigo misma, también estaban Leon, Robin, Aubrey, Charlotte y el nuevo chico el cual no tenia mucho contacto con el, pero era debido a que no lo conocía quizás lo suficiente para poder entablar una larga conversación con el pero de alguna forma ya era parte del grupo lo cual era bueno debido a las faltas que habían al no estar Van ni mi hermano Noah. Los dos habían sido chicos muy importantes pero se veía que la baja era considerable pero bueno... había que seguir sin lugar a dudas en todo rogando que aparecieran pero vivos y no muertos.
Cuando las cosas iban o parecían ir bien nuevamente el caos vino al lugar ya que no se si era una manada o que pero un grupo de esas cosas irrumpio en el lugar matando a los dos moradores justo en frente de nuestros ojos ya que los chicos batallaban y nosotras tambien o por lo menos yo que mate a unos cuantos con el dolor en mi pecho y esperando que ninguno me rasguñara o mordiera o sino seria otro cuento pero simplemente lo hice por mi bienestar y tambien para demostrarle al grupo en si que no era una chica debil y que me habia fortalecido de forma mental y tambien fisica ya que me habia entrenado sencillamente como un reto personal y para poder matar a esas bestias ambulantes.
Logramos arrancar, John siempre cogiendo mi mano y dandome su proteccion, subiendo al coche y yendonos de alli deambulando durante algunos dias y llegando luego a un lugar que segun luego de preguntar me di cuenta que era un planetario sonriendo ya que por lo menos teniamos otro lugar donde podriamos estar tranquilos o eso pensaba yo, siendo la chica ilusa ya que luego de bajarnos debido a que nuestro lider Leon nos diera el dicto bueno comence a recorrer el lugar con mis cosas y frunci el seño luego de ver como el estacionamiento estaba infectado de caminantes suspirando por lo bajo y asintiendo a las palabras de Leon ya que este se queria tomar a mi parecer con garras y uñas al lugar por lo que estuve de acuerdo ante sus palabras sacando el seguro de la pistola y preparandola,-Por mi lado estoy lista, vamos..-murmure decidida poniendome al lado de John y esbozando una calida sonrisa para luego mirar hacia el interior del lugar y respirar hondamente esperando las siguientes palabras de el.
Luego nos comenzamos a hospedar en una granja donde de forma amable dos ancianitos nos dejaron quedarnos por algún tiempo y las cosas fueron relativamente normales ya que allí pudimos relajarnos al vernos presionados de la ciudad misma donde los zombies eran los amos y señores del lugar por lo que allí intente practicar con mi pistola ya que no quería ser una chica débil, como me consideraba dentro del grupo ante mi ineficiencia de poder matar a alguien y cuando lo hacia parecía a mi parecer una cobarde llorando a mares luego.Suspire y casi siempre andaba para todas las partes con John el cual siempre me ayudaba y apoyaba en todas las situaciones haciéndome sentir realmente segura y confiada conmigo misma, también estaban Leon, Robin, Aubrey, Charlotte y el nuevo chico el cual no tenia mucho contacto con el, pero era debido a que no lo conocía quizás lo suficiente para poder entablar una larga conversación con el pero de alguna forma ya era parte del grupo lo cual era bueno debido a las faltas que habían al no estar Van ni mi hermano Noah. Los dos habían sido chicos muy importantes pero se veía que la baja era considerable pero bueno... había que seguir sin lugar a dudas en todo rogando que aparecieran pero vivos y no muertos.
Cuando las cosas iban o parecían ir bien nuevamente el caos vino al lugar ya que no se si era una manada o que pero un grupo de esas cosas irrumpio en el lugar matando a los dos moradores justo en frente de nuestros ojos ya que los chicos batallaban y nosotras tambien o por lo menos yo que mate a unos cuantos con el dolor en mi pecho y esperando que ninguno me rasguñara o mordiera o sino seria otro cuento pero simplemente lo hice por mi bienestar y tambien para demostrarle al grupo en si que no era una chica debil y que me habia fortalecido de forma mental y tambien fisica ya que me habia entrenado sencillamente como un reto personal y para poder matar a esas bestias ambulantes.
Logramos arrancar, John siempre cogiendo mi mano y dandome su proteccion, subiendo al coche y yendonos de alli deambulando durante algunos dias y llegando luego a un lugar que segun luego de preguntar me di cuenta que era un planetario sonriendo ya que por lo menos teniamos otro lugar donde podriamos estar tranquilos o eso pensaba yo, siendo la chica ilusa ya que luego de bajarnos debido a que nuestro lider Leon nos diera el dicto bueno comence a recorrer el lugar con mis cosas y frunci el seño luego de ver como el estacionamiento estaba infectado de caminantes suspirando por lo bajo y asintiendo a las palabras de Leon ya que este se queria tomar a mi parecer con garras y uñas al lugar por lo que estuve de acuerdo ante sus palabras sacando el seguro de la pistola y preparandola,-Por mi lado estoy lista, vamos..-murmure decidida poniendome al lado de John y esbozando una calida sonrisa para luego mirar hacia el interior del lugar y respirar hondamente esperando las siguientes palabras de el.
Emily L. Wheeler- Puntos de experiencia : 331
Fecha de inscripción : 10/10/2012
Localización : Sidney, Australia
Re: Trama I [Grupo Errantes II]: Declaración de Guerra
Todos estaban listos, pero yo sabía que entrar de manera frontal era una tontería, por lo mismo se me ocurrió un plan -Todos a la autocaravana- los dirigí hasta aquel enorme vehículo metiéndolos a todos, me quede en la puerta y deje que Charlotte tomara el control -Arranca y dirígete contra esa masa de caminantes- le señale y aunque al principio pareció no entender obedeció, el enorme motor de aquel vehículo causo un gran estruendo y tras estar encendido se arrancó rápidamente rumbo a los caminantes, estos a su vez se giraron un poco , apenas lo suficiente para ver como la autocaravana los aplastaba haciéndolos pedazos, la autocaravana se detuvo aproximadamente a la mitad, los enemigos restantes comenzaron a dirigirse a donde estábamos, abrí la ventanilla del costado y apoye ahí mi rifle de asalto -¡Fuego!- les ordene a los demás comenzando a disparar todo el cargador que tenía matando a la mayoría de enemigos al frente, una vez que se me acabaron las balas solté mi rifle dejándolo en la caravana -Charlotte, tú te quedas a cuidar el vehículo, los demás, ¡síganme!- un caminante estaba en la puerta y de una fuerte patada la abrí haciendo que por la inercia la misma le partiese el cráneo saque mi revolver y dispare a un caminante que se venía en contra mía acabando con su sufrimiento, me encontraba al frente del grupo y la forma en que atacaba era más agresiva de lo usual, hace tiempo para mi acabar con estas cosas era como cualquier misión del ejército, pero después de todo lo vivido, de todo lo sufrido, de tantas veces que pusieron en riesgo a Bryd y a mis amigos…ya no podía simplemente mantenerme indiferente, para mi estas cosas ya ni siquiera eran humanas…eran poco más que fenómenos que no merecían misericordia.
Dispare a otros caminantes y vi más allá como por el sonido algunos caminantes más comenzaban a emerger, no eran muchos y aquí ya no quedaban demasiados, ciertamente pensé que serían más problemáticos, pero quizás por la experiencia que todos habíamos ido adquiriendo con el tiempo acabar con ellos se volvió una tarea más fácil -John, Emily…a la izquierda…Robin, Bryd…a la derecha, Caelyn…conmigo al frente- nos estaba dividiendo un poco para evitar que los caminantes nos rodearan, además como quedaban pocos debería ser simple. Dispare a otros caminantes y me quede sin balas en el revólver, una de esas cosas estaba ya estirando sus brazos contra mi hasta que saque mi espada rebanándole la cabeza, Caelyn ayudaba con los que podía y pasaron apenas uno o dos minutos hasta que acabamos por nuestra parte, mire atrás y los otros no parecían tener muchas dificultades tampoco. Caelyn repentinamente me dijo que iría a explorar un poco los alrededores para conocer más el terreno, acepte pues aunque no era bueno ir solo tampoco lo era estar en medio de un sitio sin saber que tantos enemigos podía haber en los alrededores, quien sabe quizás estábamos metiéndonos en la boca del lobo.
Regrese hasta donde estaban Bryd y Robin -¿Están bien?- guarde la espada viendo como Bryd acababa con el ultimo, o mejor dicho uno de los últimos, pues en ese mismo instante cuando me giraba para ver a John y Emily dos caminantes salieron, se movían con lentitud hasta donde estaban ellos, por lo mismo con un movimiento suave de cabeza les ordene a las chicas que me acompañaran para respaldar a nuestros compañeros, dos caminantes a fin y al cabo no serían mayor problema, al menos no lo creía.
Dispare a otros caminantes y vi más allá como por el sonido algunos caminantes más comenzaban a emerger, no eran muchos y aquí ya no quedaban demasiados, ciertamente pensé que serían más problemáticos, pero quizás por la experiencia que todos habíamos ido adquiriendo con el tiempo acabar con ellos se volvió una tarea más fácil -John, Emily…a la izquierda…Robin, Bryd…a la derecha, Caelyn…conmigo al frente- nos estaba dividiendo un poco para evitar que los caminantes nos rodearan, además como quedaban pocos debería ser simple. Dispare a otros caminantes y me quede sin balas en el revólver, una de esas cosas estaba ya estirando sus brazos contra mi hasta que saque mi espada rebanándole la cabeza, Caelyn ayudaba con los que podía y pasaron apenas uno o dos minutos hasta que acabamos por nuestra parte, mire atrás y los otros no parecían tener muchas dificultades tampoco. Caelyn repentinamente me dijo que iría a explorar un poco los alrededores para conocer más el terreno, acepte pues aunque no era bueno ir solo tampoco lo era estar en medio de un sitio sin saber que tantos enemigos podía haber en los alrededores, quien sabe quizás estábamos metiéndonos en la boca del lobo.
Regrese hasta donde estaban Bryd y Robin -¿Están bien?- guarde la espada viendo como Bryd acababa con el ultimo, o mejor dicho uno de los últimos, pues en ese mismo instante cuando me giraba para ver a John y Emily dos caminantes salieron, se movían con lentitud hasta donde estaban ellos, por lo mismo con un movimiento suave de cabeza les ordene a las chicas que me acompañaran para respaldar a nuestros compañeros, dos caminantes a fin y al cabo no serían mayor problema, al menos no lo creía.
- Spoiler:
- Los que ya no están se tomara que se separan del grupo y que no se sabe que paso con ellos como siempre
Leon O. Cole- Puntos de experiencia : 218
Fecha de inscripción : 20/09/2012
Re: Trama I [Grupo Errantes II]: Declaración de Guerra
Cuando todos asintieron ante la idea y estábamos preparándonos, no solo física, si no también mentalmente para tomar el observatorio a lo cual simplemente estaba esperando ordenes mientras tanto intentaba calmarme un poco para poder estar completa a la hora de entrar a ese lugar, pues nadie sabía lo que nos aguardaba dentro.
Cuando Leon dijo que todos subiéramos a la autocaravana me tomó algo por sorpresa, pero cuando vi en Leon la mirada que tenía, supe que él no estaba dispuesto a dar paso atrás a lo cual sin dudar subí como todos escuchando como Leon le daba ordenes a Charlotte de que avanzara contra los caminantes a lo cual al escuchar eso miré a donde estaban todos. — ¡Sujetense! — La autocaravana comenzó a andar con fuerza derribando varios de esos caminantes, incluso pude escuchar algunos cráneos de ellos destrozándose bajo las llantas de la autocaravana.
Cuando llegamos a la puerta Leon saco su fusil disparando, mientras yo me acercaba a una ventaba abriéndola y comenzando a disparar con la pistola de 9 mm. Así bajamos de el vehículo y nos dirigimos a la entrada de el observatorio, Leon se encargaba de los que estaban delante mientras yo guardaba su espalda a lado de Robin para defender los laterales.
Al entrar Leon nos dio más ordenes a lo cual asentí para ir con Robin a la derecha. — Vamos. — Noté que Loki no venía con ella, se había quedado con Charlotte seguramente y por ello me alegraba, en un lugar donde no sabíamos que podíamos encontrar era muy peligroso que el viniera.
Entramos a un cuarto el cual era una cafetería y al escuchar el ruido que hacíamos no solo al caminar si no incluso con las armas, de inmediato nos fueron a atacar. Comencé el fuego contra ellos y Robin comenzó a auxiliarme en exterminar con todos. Me alegre al tenerla a mi lado mientras seguía disparando de un lado a otro intentando acabar con todos hasta que al final terminamos, en eso Leon llegó preguntándonos si estábamos bien a lo cual asentí para ver a Robin buscando que ella también estuviera bien, pero no me dio mucho tiempo de reaccionar cuando Leon pidió que auxiliáramos a Emy y john a lo cual sin dudar fui tras de él para ayudar a acabar con lo que nos atacaba.
Cuando Leon dijo que todos subiéramos a la autocaravana me tomó algo por sorpresa, pero cuando vi en Leon la mirada que tenía, supe que él no estaba dispuesto a dar paso atrás a lo cual sin dudar subí como todos escuchando como Leon le daba ordenes a Charlotte de que avanzara contra los caminantes a lo cual al escuchar eso miré a donde estaban todos. — ¡Sujetense! — La autocaravana comenzó a andar con fuerza derribando varios de esos caminantes, incluso pude escuchar algunos cráneos de ellos destrozándose bajo las llantas de la autocaravana.
Cuando llegamos a la puerta Leon saco su fusil disparando, mientras yo me acercaba a una ventaba abriéndola y comenzando a disparar con la pistola de 9 mm. Así bajamos de el vehículo y nos dirigimos a la entrada de el observatorio, Leon se encargaba de los que estaban delante mientras yo guardaba su espalda a lado de Robin para defender los laterales.
Al entrar Leon nos dio más ordenes a lo cual asentí para ir con Robin a la derecha. — Vamos. — Noté que Loki no venía con ella, se había quedado con Charlotte seguramente y por ello me alegraba, en un lugar donde no sabíamos que podíamos encontrar era muy peligroso que el viniera.
Entramos a un cuarto el cual era una cafetería y al escuchar el ruido que hacíamos no solo al caminar si no incluso con las armas, de inmediato nos fueron a atacar. Comencé el fuego contra ellos y Robin comenzó a auxiliarme en exterminar con todos. Me alegre al tenerla a mi lado mientras seguía disparando de un lado a otro intentando acabar con todos hasta que al final terminamos, en eso Leon llegó preguntándonos si estábamos bien a lo cual asentí para ver a Robin buscando que ella también estuviera bien, pero no me dio mucho tiempo de reaccionar cuando Leon pidió que auxiliáramos a Emy y john a lo cual sin dudar fui tras de él para ayudar a acabar con lo que nos atacaba.
Audrey O'Brien- Puntos de experiencia : 241
Fecha de inscripción : 20/09/2012
Localización : Sydney
Re: Trama I [Grupo Errantes II]: Declaración de Guerra
Con cada segundo que pasaba podía sentir como los caminantes se acercaban cada vez más, comenzaba impacientarme y miré a Leon casi con desesperación tratando de encontrar una respuesta a lo que procederíamos a hacer. Indicó que subiéramos a la caravana, corrí al instante mientras Loki iba atrás de mí. Charlotte conducía lo más rápido que se podía mientras en el camino arrollaba y destruía la mayor cantidad de criaturas posibles; Leon y Audrey disparaban sus armas por las ventanillas, y estaba dispuesta a hacer lo mismo cuando nos detuvimos y se nos señaló los caminos que cada quien tomaría para despejar el área, yo iría junto con Audrey por el lado izquierdo.
Loki estuvo a punto de bajar a seguirme pero con la mirada le indiqué que se quedará y obedeció. Saqué la pequeña hacha sosteniéndola con la mano izquierda mientras que con la derecha empuñaba con fuerza el revólver. Traté de disparar lo menos posible, mientras que con el hacha lanzaba más y más golpes a los caminantes que se me ponían en frente, me ayudaba de mis piernas para alejarlos de mi mediante patadas y pisé el cráneo con fuerza a un par de ellos. Desde la horda que nos había atacado en la granja no me había sentido tan rodeada de esos monstruos, pero desde ese entonces algo dentro de mí había cambiado, miraba a esas criaturas con frialdad mientras intentaba deshacerme de la mayor cantidad de ellas, miraba a Audrey de reojo de vez en vez procurando que no fuera rodeada y si era necesario la ayudaba a acabar con uno de ellos. Era curioso como el tiempo parecía hacerse más lento cuando combatíamos con esas cosas, pero de un momento a otro se terminaron, al menos las que estaban cerca de nosotras.
Entonces miré a Audrey, estaba bien, eso era un alivio; Leon se acercó a nosotras él no parecía haber tenido problemas tampoco. -¿Dónde está Caelyn…?- Dije casi en un susurro al intentar recuperar el aliento y retiraba algunos puntitos de sangre que habían salpicado mi cara. Aun así no hubo respuesta porque Emily y John aun lidiaban con un par de caminantes, corrí hacia ellos y apunté mi arma a uno que estaba a punto de morder el hombro de Emily, no era un tiro fácil pero no podía pensarlo demasiado, jalé del gatillo, la bala atravesó por un lado el cráneo de la criatura, muy cerca del cuello de Emily, por un momento me asusté al pensar que la había herido, pero por suerte mía o tal vez de ella, no le había sucedido nada, suspiré aliviada. Los caminantes que habían atacado a John también habían sido eliminados, por ahora estábamos a salvo.
Loki estuvo a punto de bajar a seguirme pero con la mirada le indiqué que se quedará y obedeció. Saqué la pequeña hacha sosteniéndola con la mano izquierda mientras que con la derecha empuñaba con fuerza el revólver. Traté de disparar lo menos posible, mientras que con el hacha lanzaba más y más golpes a los caminantes que se me ponían en frente, me ayudaba de mis piernas para alejarlos de mi mediante patadas y pisé el cráneo con fuerza a un par de ellos. Desde la horda que nos había atacado en la granja no me había sentido tan rodeada de esos monstruos, pero desde ese entonces algo dentro de mí había cambiado, miraba a esas criaturas con frialdad mientras intentaba deshacerme de la mayor cantidad de ellas, miraba a Audrey de reojo de vez en vez procurando que no fuera rodeada y si era necesario la ayudaba a acabar con uno de ellos. Era curioso como el tiempo parecía hacerse más lento cuando combatíamos con esas cosas, pero de un momento a otro se terminaron, al menos las que estaban cerca de nosotras.
Entonces miré a Audrey, estaba bien, eso era un alivio; Leon se acercó a nosotras él no parecía haber tenido problemas tampoco. -¿Dónde está Caelyn…?- Dije casi en un susurro al intentar recuperar el aliento y retiraba algunos puntitos de sangre que habían salpicado mi cara. Aun así no hubo respuesta porque Emily y John aun lidiaban con un par de caminantes, corrí hacia ellos y apunté mi arma a uno que estaba a punto de morder el hombro de Emily, no era un tiro fácil pero no podía pensarlo demasiado, jalé del gatillo, la bala atravesó por un lado el cráneo de la criatura, muy cerca del cuello de Emily, por un momento me asusté al pensar que la había herido, pero por suerte mía o tal vez de ella, no le había sucedido nada, suspiré aliviada. Los caminantes que habían atacado a John también habían sido eliminados, por ahora estábamos a salvo.
Robin Darcy- Puntos de experiencia : 249
Fecha de inscripción : 21/09/2012
Re: Trama I [Grupo Errantes II]: Declaración de Guerra
Después de aceptar el plan que nos había propuesto Leon se nos dieron las primeras ordenes y, para mi sorpresa, nos ordeno a todos subir a la autocaravana para después decirle a Charlotte que arrancara y se dirigiera justo a donde estaban los caminantes, me sostuve fuerte con una mano y con la otra sostuve a Emily para mantenerla segura, algunos caminantes se acercaron a nosotros pero fueron destrozados uno a uno por la autocaravana.
El vehículo se detuvo y cuando vi a Leon apoyar su rifle en una de las ventanillas supe lo que tenía que hacer, tome mi ballesta, abrí la ventanilla del techo de la autocaravana y me dispuse a disparar a la cabeza de los caminantes que estaban alrededor de nosotros. Después de terminar de asesinarlos Leon salio del auto y por consiguiente salí por la parte de arriba y abrí la puerta para que Emily saliera conmigo.
Los caminantes se acercaban cada vez más pero Leon no tenía planes de rendirse así que tomó su revolver y nos ordeno ir por un lado determinado, a Emily y ami nos tocó ir hacia la izquierda, recogí las flechas que estaban incrustadas en los caminantes, mire a Emily a los ojos y comencé a matar caminantes, le disparaba a unos en la cabeza, a otros los golpeaba con la ballesta y cuando estaban en el suelo pisaba sus cabezas hasta que quedaran destrozadas y a otros más tan solo les rompía el cuello, justo cuando estaba terminando con mi parte me di cuenta que un maldito caminante estaba a punto de morder a Emily, pero cuando estaba dispuesto a acabar con el, un disparo proveniente del arma de Robin acabo con el y Emily quedo a salvo, al parecer ya no había mas caminantes y por el momento estábamos sanos y salvos, -Listo , hemos terminado- susurre algo cansado pero con un gran alivio tras ver que todos estábamos bien.
El vehículo se detuvo y cuando vi a Leon apoyar su rifle en una de las ventanillas supe lo que tenía que hacer, tome mi ballesta, abrí la ventanilla del techo de la autocaravana y me dispuse a disparar a la cabeza de los caminantes que estaban alrededor de nosotros. Después de terminar de asesinarlos Leon salio del auto y por consiguiente salí por la parte de arriba y abrí la puerta para que Emily saliera conmigo.
Los caminantes se acercaban cada vez más pero Leon no tenía planes de rendirse así que tomó su revolver y nos ordeno ir por un lado determinado, a Emily y ami nos tocó ir hacia la izquierda, recogí las flechas que estaban incrustadas en los caminantes, mire a Emily a los ojos y comencé a matar caminantes, le disparaba a unos en la cabeza, a otros los golpeaba con la ballesta y cuando estaban en el suelo pisaba sus cabezas hasta que quedaran destrozadas y a otros más tan solo les rompía el cuello, justo cuando estaba terminando con mi parte me di cuenta que un maldito caminante estaba a punto de morder a Emily, pero cuando estaba dispuesto a acabar con el, un disparo proveniente del arma de Robin acabo con el y Emily quedo a salvo, al parecer ya no había mas caminantes y por el momento estábamos sanos y salvos, -Listo , hemos terminado- susurre algo cansado pero con un gran alivio tras ver que todos estábamos bien.
John Taylor- Puntos de experiencia : 73
Fecha de inscripción : 21/09/2012
Re: Trama I [Grupo Errantes II]: Declaración de Guerra
Luego de que todos hubieramos dicho un "si" en lo que respecta a dar fuego y matar a esas bestias ambulantes las cuales no pensaban, sino que actuaban en busca de carne fresca para morder, Leon nos ordeno entrar a la auto-caravana cosa que hice sin chistar estando de la mano con John, sentandome a su lado tratando de que mis nervios, que en ese momento se hicieron latente, se calmaran ya que dudaba que en el grupo se necesitara una chica bastante cobarde como yo lo era lo cual era un factor bastante peligroso adentro y sobretodo ahora lo cual luego de ver como arrancaba el coche y destruia los craneos y los restantes surgian de no se donde hacia nosotros dispuestos a atacarnos pero nadie se quedo de brazos cruzados, no señor, sino que con todas sus armas arrimaron en contra de los zombies y yo no me quede atras ya que juntando todo el valor posible comence a disparar achuntandole a varios de alli haciendo que de alguna forma extraña mi corazon palpitara mas deprisa, señal quizas, de que era la adrenalina del momento.
Fuimos con John luego a la izquierda ya que nuestro jefe luego de que detuviera el coche, o mas bien lo hiciera detener, sencillamente nos ordeno ir en dicha direccion para por mi lado aun sentir aquella "excitacion" o "adrenalina" al querer matar a esas cosas.Era bastante extraña mi reaccion puesto que anteriormente era una chica bastante calmada y tranquila, mas bien normal dentro de todo pero quizas era el panorama mismo que me hacia actuar de esta manera asi que comence a disparar mi arma matando a varios zombies aunque no me di cuenta que habia uno que se acercaba hacia mi y por poco me muerde el hombro pero gracias a un disparo que provino de Robin logro acabar con el dejando mi piel bastante erizada y por lo cual palideci de forma inmediata mirando o dandome cuenta del peligro el cual casi estuve pero ella me salvo la vida sonriendo pero senti mis piernas flaquear y cai de rodillas al lado del cadaver inerte de esa cosa mirando a la nada misma, producto quizas del shock del momento.
-C-casi...mori...-logre articular aun sin poder creer lo que recientemente sucedio mirando al observatorio o donde seria nuestra proximo refugio sin articular mas palabras, sintiendo todo mi cuerpo pesado y sin poder moverme del lugar aferrando la pistola con mi mano.
Fuimos con John luego a la izquierda ya que nuestro jefe luego de que detuviera el coche, o mas bien lo hiciera detener, sencillamente nos ordeno ir en dicha direccion para por mi lado aun sentir aquella "excitacion" o "adrenalina" al querer matar a esas cosas.Era bastante extraña mi reaccion puesto que anteriormente era una chica bastante calmada y tranquila, mas bien normal dentro de todo pero quizas era el panorama mismo que me hacia actuar de esta manera asi que comence a disparar mi arma matando a varios zombies aunque no me di cuenta que habia uno que se acercaba hacia mi y por poco me muerde el hombro pero gracias a un disparo que provino de Robin logro acabar con el dejando mi piel bastante erizada y por lo cual palideci de forma inmediata mirando o dandome cuenta del peligro el cual casi estuve pero ella me salvo la vida sonriendo pero senti mis piernas flaquear y cai de rodillas al lado del cadaver inerte de esa cosa mirando a la nada misma, producto quizas del shock del momento.
-C-casi...mori...-logre articular aun sin poder creer lo que recientemente sucedio mirando al observatorio o donde seria nuestra proximo refugio sin articular mas palabras, sintiendo todo mi cuerpo pesado y sin poder moverme del lugar aferrando la pistola con mi mano.
Emily L. Wheeler- Puntos de experiencia : 331
Fecha de inscripción : 10/10/2012
Localización : Sidney, Australia
Re: Trama I [Grupo Errantes II]: Declaración de Guerra
No preste mucha atención a lo sucedido después, entre en una especie de trance, mientras todos se dirigían para apoyar a John y Emily yo me giraba escuchando una voz familiar, provenía del otro pasillo que no habíamos explorado aun, estaba por ir allí cuando de repente el ultimo sonido de las balas me despertó, mire entonces a todos -¿Están bien?- me acerque un poco, solo para corroborar aquello, revise entonces el sitio, vacío, a excepción de nosotros. Envaine la espada -Vamos a tener que sacar todos estos cadáveres y limpiar, además necesitamos un mapa del observatorio, puede que existan más secciones con más caminantes…- suspire mirando un momento a todos, en especial a Emily que parecía un poco afectada por algo sucedido, suponía que aún no se acostumbraba a cosas como esta -John y Emily, ustedes vayan con Charlotte, recojan el otro vehículo y junto a la autocaravana estaciónenlo fuera de aquí por si necesitamos salir rápido- me acerque a una pequeña mesa y deje encima mi revolver sacando después algunas balas de mis bolsillos y comenzando a cargarlo -Bryd y Robin, ustedes revisen la zonas despejadas, busquen un plano de este sitio y asegúrense que no quede ningún caminante más- una vez cargada la recamara volví a retomar el revolver -Yo iré a investigar un poco para ver si encuentro algo útil- avance por el pasillo hasta girar perdiendo a los demás de vista, ahora me encontraba en un corredor algo estrecho, con poca iluminación, aunque afuera había sol aquí era distinto, me recordó a entrar a un cuartel general del ejército en el subterráneo, todo estaba oscuro y salvo las luces no había mucho que te pudiese iluminar. Pase así un par de segundos hasta llegar a una puerta y la abrí llegando hasta la zona principal del observatorio.
Había un telescopio -o como quiera que se llame- de gran tamaño, llevaba mucho tiempo sin usar, seguro que desde el brote de la enfermedad, además había otros artilugios por allí, computadoras y demás que estaban apagadas; avance causando un poco de eco con mis zapatos, llegue a un pequeño escritorio donde había algunas notas, la mayoría de ellas no las entendía, como que hablaban de alguna especie de investigación, sin embargo entre tantas hojas logre encontrarme unas cuantas escritas a mano -¿Uhm?- hablaban de la enfermedad y del paso de los días, no tuve tiempo ni paciencia de leerlas todas, así que me salte hasta la última, tenía la fecha de hace dos semanas donde refería que un grupo de personas se había unido al pequeño grupo de sobrevivientes -¿Dos semanas?- susurre, pues eso significaba que quizás aún estaban cerca de este sitio. No sé si es mala suerte o si llamo mucho a la desgracia, pero en ese momento justo cuando me di la vuelta un disparo paso rozándome el hombro y haciéndome caer por mera reacción, una vez en el suelo me arrastre por debajo del escritorio hasta quedar a cubierto y mirar por un costado.
Ahí parado con un arma se encontraba un hombre, saque un poco la mano y le dispare fallándole por poco, se puso a cubierto detrás del gran telescopio y pronto pasos se empezaron a escuchar del pasillo contrario al que había llegado, un grupo de unas seis personas emergió, la mayoría con armas como cuchillos y demás, un nuevo disparo se escuchó atravesando el escritorio pero afortunadamente sin darme alcance y fue entonces cuando la voz se elevó preguntando quien era, no respondí, solamente aproveche el tiempo para recargar la bala que había gastado y estar listo para defenderme, lo que menos quería se estaba volviendo una realidad, es decir, enfrentarnos con otro grupo por este sitio.
Había un telescopio -o como quiera que se llame- de gran tamaño, llevaba mucho tiempo sin usar, seguro que desde el brote de la enfermedad, además había otros artilugios por allí, computadoras y demás que estaban apagadas; avance causando un poco de eco con mis zapatos, llegue a un pequeño escritorio donde había algunas notas, la mayoría de ellas no las entendía, como que hablaban de alguna especie de investigación, sin embargo entre tantas hojas logre encontrarme unas cuantas escritas a mano -¿Uhm?- hablaban de la enfermedad y del paso de los días, no tuve tiempo ni paciencia de leerlas todas, así que me salte hasta la última, tenía la fecha de hace dos semanas donde refería que un grupo de personas se había unido al pequeño grupo de sobrevivientes -¿Dos semanas?- susurre, pues eso significaba que quizás aún estaban cerca de este sitio. No sé si es mala suerte o si llamo mucho a la desgracia, pero en ese momento justo cuando me di la vuelta un disparo paso rozándome el hombro y haciéndome caer por mera reacción, una vez en el suelo me arrastre por debajo del escritorio hasta quedar a cubierto y mirar por un costado.
Ahí parado con un arma se encontraba un hombre, saque un poco la mano y le dispare fallándole por poco, se puso a cubierto detrás del gran telescopio y pronto pasos se empezaron a escuchar del pasillo contrario al que había llegado, un grupo de unas seis personas emergió, la mayoría con armas como cuchillos y demás, un nuevo disparo se escuchó atravesando el escritorio pero afortunadamente sin darme alcance y fue entonces cuando la voz se elevó preguntando quien era, no respondí, solamente aproveche el tiempo para recargar la bala que había gastado y estar listo para defenderme, lo que menos quería se estaba volviendo una realidad, es decir, enfrentarnos con otro grupo por este sitio.
Leon O. Cole- Puntos de experiencia : 218
Fecha de inscripción : 20/09/2012
Re: Trama I [Grupo Errantes II]: Declaración de Guerra
Por un momento un caminante salió tras de Emy y estaba apunto de morderla. Pareciera que el tiempo se había congelado segundos para mi, pues no pude reaccionar tan rápido como para dispararle, pero antes de que otra cosa sucediera el caminante se desplomó a lo cual giré mi cabeza para ver quien había disparado viendo que Robin había abierto fuego contra él por lo cual dentro de mi me alegré un poco aunque no por eso dejé así a Emy, como había dicho alguna vez, a ella la veía como si fuera mi hermana y estaba ahora preocupada por ella.
Corrí a su lado —Emy ¿Estás bien? — Noté como ella estaba casi en Shock por lo que antecedió a lo cual solo la abracé un poco como si ahora yo fuera su hermana mayor intentando calmarla pues parecía paralizada por lo que pasó. De todas formas ella no estaba acostumbrada a esto y muchos lo sabíamos. Es por ello que miré a Leon para pedirle que dejara que Emy regresara con Charlotte cuando me di cuenta Leon estaba distraído, era como cuando en las noches le hablaba y él simplemente estaba en un mundo lejano, su cuerpo presente pero su mente en otro lugar. No sabía ahora lo que estaba pensando y mientras acababan con unos caminantes John y Robin noté que Leon siguió así hasta que de un momento a otro reaccionó.
Pero a pesar de sus palabras no prestó mucha atención lo cual en parte me molesto levemente, pero era entendible, estábamos en una zona peligrosa donde no sabíamos nada y debíamos seguir. Entonces dio mas ordenes, por suerte Emy regresaría a los coches, aunque no tanta suerte por que sabía que afuera también había peligro, a lo cual con una mirada encargue su cuidado a John para dejar que se fueran mientras miraba como Leon recargaba su arma.
Suspiré un poco pero escuché sus nuevas ordenes, las cuales no me agradaron del todo pues él iría solo a explorar, ahí fue cuando me di cuenta de la ausencia de Caelyn lo cual me hizo buscarla con la mirada. Intenté oponerme a los planes de Leon pero me detuve pues sabía que no era momento de discutir nada y que ademas Leon se enojaría, por lo cual confiando en que el estaría bien dejé que se fuera para mirar a Robin. — Sigamos... — Comencé a caminar con cautela por un pasillo que se veía despejado, mis ojos veían como entre muro y muro había fotografías de galaxias, estrellas, meteoros y más, pero no había un mapa. Esperaba que en la intersección de un pasillo pudiéramos encontrar algo pero algo me sorprendió al llegar al final de este, pues en vez de encontrar un mapa dimos con un jardín botánico.
La brisa pasaba por una maya que cubría el cielo, casi imperceptible y el follaje de los arboles era extensa, tanto que pareciera que dentro de el observatorio fuera una selva más que nada. Aquel cambio brusco me desconcertó por un momento pero después me alegró. — ¿Quién lo diría? Hay dentro un jardín botánico... Y muy bien cuidado por cierto. — Reí levemente mirando a Robin para luego mirar como algunas hojas superaban su altura promedio. Al parecer el jardín no había sufrido estragos por el pequeño riachuelo artificial que habían construido para su mantenimiento.
Comencé a caminar con cautela con Robin tras de mi, pero un gemido hizo que mi piel se erizara haciendo que mi mano con el arma se levantara. Caminamos más despacio esperando que esa cosa saliera cuando de un momento a otro frente a mi aparecieron cinco caminantes. Le hice a Robin señas de que corriéramos a un claro donde tuviéramos mas visibilidad pues entre las plantas no podíamos defendernos muy bien y así comenzamos a dirigirnos por donde entramos, pero en ese momento algo de entre las plantas se movió y tomándome por sorpresa algo cayó sobré mi haciendo que terminara en el suelo, comencé así a forcejear con eso pues me sentía en peligro y aunque estaba asustada, no me deje dominar por el miedo y aunque mi arma al caer se deslizo por el piso con agilidad y sin pensarlo dos veces tomé con mi otra mano el cuchillo que tenía en mi cintura para enterrarlo directamente en la cabeza de aquello que me estaba atacando.
Mis ojos estaban algo cerrados por el golpe cuando caí con esa cosa encima por lo cual cuando ataqué no me di cuenta de lo que estaba atacando pero al sentir algo cálido salpicarme hizo que abriera mis ojos lo cual hizo que mis ojos se abrieran por completo y suprimiera de mi un grito haciendo que sonara más a una inhalación espontanea denotando sorpresa y miedo. De inmediato lancé el cuerpo de aquello al lado contrario donde venían los caminantes para levantarme apresurada y caminar algo temblorosa hacia donde estaba Robin, mis ojos no se apartaban de aquel cadáver de lo que era antes un "ser humano". Pero esto no terminó aquí, pues mi miedo se prolongó más al ver que los caminantes viendo el cadáver se arrodillaron para comenzar a comerlo. Entonces fue ahí cuando reaccioné, aquello que había matado no era lo que estaba acostumbrada a matar, no era un caminante, era un sobreviviente y eso explicaba el por que la calidez de la sangré que me salpico en el rostro y parte de mis manos.
Aquello estaba con vida hace unos minutos y era el por que ahora los caminantes comenzaban a avorazarse con el sabor de su carne. Comencé a temblar mientras mi mano se dirigió a mi boca cubriendola un poco, aún estaba manchada y miraba con horror lo que había hecho, el matar a un sobreviviente, aunque mi mirada notó que cerca de él había un cuchillo, no era el mió pues aún lo tenía clavado en su ojo izquierdo, lo cual me hizo entender que él me intentó matar primero, pues si no ¿para que tenía el cuchillo? La verdad es que no sabía como pero me había librado de ser yo quien estuviera ahora siendo comida de caminante. Pero eso no era para alegrarse, aún estaba en shock por haber matado a un humano vivo.
Matar caminantes era una cosa, pero personas era otra y eso me hizo estar mal, nunca había llegado a tal extremo de matar a alguien vivo y eso causo mi estado actual. Por un momento me perdí de lo que pasaba, no sabía si Robin estaba o no haciendo algo y dentro de mi por primera vez en mucho sentí asco con aquello, sintiendo ganas de vomitar, pero más que nada era por el hecho de que la sangré seguía salpicada en mi ademas de que el espectáculo que me brindaban los caminantes al comérselo no ayudaba mucho. Mi estomago se revolvió más de tal forma que cerré mis ojos intentando controlarme para no vomitar hasta que al abrirlos no solo destacaba el cuerpo inerte de el sobreviviente que había matado si no también el de los caminantes que se lo estaban comiendo.
Fue cuando sin querer hacerlo me acerqué para tomar mi cuchillo quitandolo de donde se lo clavé y sin mirar el cuerpo mantuve mi mirada hacia Robin. — ¿Qué esta pasando aquí? — Le dije aduras penas mientras más ruidos comenzaban y entre ellos una voz resonó entre el follaje de el sitió Gritando Elionor. Fue cuando entendí que había mas sobrevivientes por lo cual miré a Robin para ponernos a la defensiva de lo que fuera a pasar.
Corrí a su lado —Emy ¿Estás bien? — Noté como ella estaba casi en Shock por lo que antecedió a lo cual solo la abracé un poco como si ahora yo fuera su hermana mayor intentando calmarla pues parecía paralizada por lo que pasó. De todas formas ella no estaba acostumbrada a esto y muchos lo sabíamos. Es por ello que miré a Leon para pedirle que dejara que Emy regresara con Charlotte cuando me di cuenta Leon estaba distraído, era como cuando en las noches le hablaba y él simplemente estaba en un mundo lejano, su cuerpo presente pero su mente en otro lugar. No sabía ahora lo que estaba pensando y mientras acababan con unos caminantes John y Robin noté que Leon siguió así hasta que de un momento a otro reaccionó.
Pero a pesar de sus palabras no prestó mucha atención lo cual en parte me molesto levemente, pero era entendible, estábamos en una zona peligrosa donde no sabíamos nada y debíamos seguir. Entonces dio mas ordenes, por suerte Emy regresaría a los coches, aunque no tanta suerte por que sabía que afuera también había peligro, a lo cual con una mirada encargue su cuidado a John para dejar que se fueran mientras miraba como Leon recargaba su arma.
Suspiré un poco pero escuché sus nuevas ordenes, las cuales no me agradaron del todo pues él iría solo a explorar, ahí fue cuando me di cuenta de la ausencia de Caelyn lo cual me hizo buscarla con la mirada. Intenté oponerme a los planes de Leon pero me detuve pues sabía que no era momento de discutir nada y que ademas Leon se enojaría, por lo cual confiando en que el estaría bien dejé que se fuera para mirar a Robin. — Sigamos... — Comencé a caminar con cautela por un pasillo que se veía despejado, mis ojos veían como entre muro y muro había fotografías de galaxias, estrellas, meteoros y más, pero no había un mapa. Esperaba que en la intersección de un pasillo pudiéramos encontrar algo pero algo me sorprendió al llegar al final de este, pues en vez de encontrar un mapa dimos con un jardín botánico.
La brisa pasaba por una maya que cubría el cielo, casi imperceptible y el follaje de los arboles era extensa, tanto que pareciera que dentro de el observatorio fuera una selva más que nada. Aquel cambio brusco me desconcertó por un momento pero después me alegró. — ¿Quién lo diría? Hay dentro un jardín botánico... Y muy bien cuidado por cierto. — Reí levemente mirando a Robin para luego mirar como algunas hojas superaban su altura promedio. Al parecer el jardín no había sufrido estragos por el pequeño riachuelo artificial que habían construido para su mantenimiento.
Comencé a caminar con cautela con Robin tras de mi, pero un gemido hizo que mi piel se erizara haciendo que mi mano con el arma se levantara. Caminamos más despacio esperando que esa cosa saliera cuando de un momento a otro frente a mi aparecieron cinco caminantes. Le hice a Robin señas de que corriéramos a un claro donde tuviéramos mas visibilidad pues entre las plantas no podíamos defendernos muy bien y así comenzamos a dirigirnos por donde entramos, pero en ese momento algo de entre las plantas se movió y tomándome por sorpresa algo cayó sobré mi haciendo que terminara en el suelo, comencé así a forcejear con eso pues me sentía en peligro y aunque estaba asustada, no me deje dominar por el miedo y aunque mi arma al caer se deslizo por el piso con agilidad y sin pensarlo dos veces tomé con mi otra mano el cuchillo que tenía en mi cintura para enterrarlo directamente en la cabeza de aquello que me estaba atacando.
Mis ojos estaban algo cerrados por el golpe cuando caí con esa cosa encima por lo cual cuando ataqué no me di cuenta de lo que estaba atacando pero al sentir algo cálido salpicarme hizo que abriera mis ojos lo cual hizo que mis ojos se abrieran por completo y suprimiera de mi un grito haciendo que sonara más a una inhalación espontanea denotando sorpresa y miedo. De inmediato lancé el cuerpo de aquello al lado contrario donde venían los caminantes para levantarme apresurada y caminar algo temblorosa hacia donde estaba Robin, mis ojos no se apartaban de aquel cadáver de lo que era antes un "ser humano". Pero esto no terminó aquí, pues mi miedo se prolongó más al ver que los caminantes viendo el cadáver se arrodillaron para comenzar a comerlo. Entonces fue ahí cuando reaccioné, aquello que había matado no era lo que estaba acostumbrada a matar, no era un caminante, era un sobreviviente y eso explicaba el por que la calidez de la sangré que me salpico en el rostro y parte de mis manos.
Aquello estaba con vida hace unos minutos y era el por que ahora los caminantes comenzaban a avorazarse con el sabor de su carne. Comencé a temblar mientras mi mano se dirigió a mi boca cubriendola un poco, aún estaba manchada y miraba con horror lo que había hecho, el matar a un sobreviviente, aunque mi mirada notó que cerca de él había un cuchillo, no era el mió pues aún lo tenía clavado en su ojo izquierdo, lo cual me hizo entender que él me intentó matar primero, pues si no ¿para que tenía el cuchillo? La verdad es que no sabía como pero me había librado de ser yo quien estuviera ahora siendo comida de caminante. Pero eso no era para alegrarse, aún estaba en shock por haber matado a un humano vivo.
Matar caminantes era una cosa, pero personas era otra y eso me hizo estar mal, nunca había llegado a tal extremo de matar a alguien vivo y eso causo mi estado actual. Por un momento me perdí de lo que pasaba, no sabía si Robin estaba o no haciendo algo y dentro de mi por primera vez en mucho sentí asco con aquello, sintiendo ganas de vomitar, pero más que nada era por el hecho de que la sangré seguía salpicada en mi ademas de que el espectáculo que me brindaban los caminantes al comérselo no ayudaba mucho. Mi estomago se revolvió más de tal forma que cerré mis ojos intentando controlarme para no vomitar hasta que al abrirlos no solo destacaba el cuerpo inerte de el sobreviviente que había matado si no también el de los caminantes que se lo estaban comiendo.
Fue cuando sin querer hacerlo me acerqué para tomar mi cuchillo quitandolo de donde se lo clavé y sin mirar el cuerpo mantuve mi mirada hacia Robin. — ¿Qué esta pasando aquí? — Le dije aduras penas mientras más ruidos comenzaban y entre ellos una voz resonó entre el follaje de el sitió Gritando Elionor. Fue cuando entendí que había mas sobrevivientes por lo cual miré a Robin para ponernos a la defensiva de lo que fuera a pasar.
Audrey O'Brien- Puntos de experiencia : 241
Fecha de inscripción : 20/09/2012
Localización : Sydney
Re: Trama I [Grupo Errantes II]: Declaración de Guerra
Por un momento las situación se tranquilizó, pero no igual el resto de grupo y yo, en especial Emily, quien por los eventos que acababan de suceder se notaba intranquila y nerviosa; por un momento me sentí algo culpable ya que aquel disparo lo hice sin avisar, pero Audrey se acercó rápidamente a ella para calmarla, John fue de mucha ayuda también; sonreí ligeramente ya más tranquila. Me acerqué a la caravana buscando a Loki y acaricié su cabeza tranquilizándolo -Todo está bien chico…- murmuré y me quedé en silencio un momento junto a él quien en respuesta a mi acción restregaba su cabeza de igual forma por mi mano y mi brazo, trataba él también de reconfortarme.
Escuché las nuevas instrucciones de Leon así que me acerqué al grupo; él iría solo a explorar mientras que Audrey y yo iríamos juntas a buscar algún plano o mapa para ubicarnos mejor. Accedí, noté algo de molestia en el rostro de Audrey, la cual la asocié con preocupación de dejar a Leon solo; pensé en dejar que ella fuera con él e ir por mi cuenta a buscar los planos, pero era preferible no perder el tiempo tratando de convencerlo así que deseché la idea casi tan pronto se me cruzó por la mente. Caminaba entonces detrás de Audrey cubriendo sus espaldas y miraba a todos lados tratando de encontrar algo que nos sirviera, nada en especial; estrellas, galaxias y demás imágenes relacionadas colgadas en marcos por el pasillo en que andábamos, me distraje un momento recordando tiempos pasados que casi siempre trataba de suprimir, pero éstos fueron borrados en seco, al darme cuenta que mi compañera se había detenido, era la entrada a un jardín botánico según decían las letras encima de la puerta.
Me pareció increíble como todo estaba tan conservado, el montón de plantas, árboles y algunas flores me ofreció una vista que hacía mucho tiempo no veía y no esperaba ver jamás. Miraba maravillada a mi alrededor a la vez que daba pasos lentos, Audrey a su vez estaba emocionada y sonreía ante la naturaleza que nos rodeaba. Estaba a punto de contestar al comentario de ella cuando se escuchó una voz, más como un gemido, sostuve con fuerza el hacha lista para soltar un golpe. Corrimos hacia un claro, teníamos una vista más amplia del lugar pero no lográbamos ver quién y qué podría ser lo que se acercaba.
Entonces algo salió de entre los matorrales y saltó hacia nosotras, el salto fue rápido casi imperceptible, solté un golpe con el hacha tan veloz como pude pero solo rasgó el aire. Me di la vuelta, Audrey no estaba a mis espaldas.Cayó sobre ella. Me sentí desesperada, pero antes de poder buscar a Audrey un par de caminantes se acercaron a mí; con el hacha partí en dos la cabeza de uno y el otro que estaba a un lado de mí lo empujé haciéndolo caer y repetí el golpe al cráneo que se despedazó en un instante.
Busqué a Audrey, quien estaba a unos cuantos metros, sentada en el suelo con un grupo de caminantes comiendo cerca de ella, -¡No!- susurré alarmada, por un momento pensé que ella era el objetivo alimenticio de esas cosas, me acerqué, ella me miró, nunca había visto esa expresión en su cara, parecía asustada, al borde del llanto. –Aléjate de ahí…- mi voz estaba temblorosa, no entendía lo que pasaba, lo importante era deshacernos de esos caminantes lo más pronto posible ahora que estaban ocupados alimentándose. No resultó difícil acabar con ellos, lo cual hice lo más pronto que pude, teníamos que salir de ahí.
Tomé la mano de Audrey, ella se puso de pie, entonces escuchamos una voz desconocida llamando un nombre que no nos era familiar “Eleonor”. Audrey me miró, ahora comprendía lo que estaba sucediendo, no solo había caminantes en este lugar, había sobrevivientes y por lo que vi hecho trizas en el suelo, Audrey se había hecho cargo de uno de ellos. –Tenemos que irnos, debemos avisarle a los demás. –Mi voz era casi inaudible. –No sabemos cuántos son, ni si podremos con ellos. – Quería irme, no quería enfrentar a seres humanos, aún quedaba en mí rasgos de ese sentido del deber que me había hecho querer ser policía hacía años y además se sumaba el miedo a disparar en contra de una persona viva que había adquirido después del incidente en la granja.
La voz se acercó cada vez más, al igual que unos pasos. Pero repentinamente la voz y los pasos se silenciaron con el sonido de unas detonaciones no muy lejos de donde nos encontrábamos. John, Emily y Charlotte estaban estacionando los vehículos cerca de donde ya habíamos limpiado el lugar de caminantes, así que pensé en Leon, enfrentándose a caminantes o personas. Miré a Audrey con preocupación. –Vamos.- Le dije con urgencia.
Escuché las nuevas instrucciones de Leon así que me acerqué al grupo; él iría solo a explorar mientras que Audrey y yo iríamos juntas a buscar algún plano o mapa para ubicarnos mejor. Accedí, noté algo de molestia en el rostro de Audrey, la cual la asocié con preocupación de dejar a Leon solo; pensé en dejar que ella fuera con él e ir por mi cuenta a buscar los planos, pero era preferible no perder el tiempo tratando de convencerlo así que deseché la idea casi tan pronto se me cruzó por la mente. Caminaba entonces detrás de Audrey cubriendo sus espaldas y miraba a todos lados tratando de encontrar algo que nos sirviera, nada en especial; estrellas, galaxias y demás imágenes relacionadas colgadas en marcos por el pasillo en que andábamos, me distraje un momento recordando tiempos pasados que casi siempre trataba de suprimir, pero éstos fueron borrados en seco, al darme cuenta que mi compañera se había detenido, era la entrada a un jardín botánico según decían las letras encima de la puerta.
Me pareció increíble como todo estaba tan conservado, el montón de plantas, árboles y algunas flores me ofreció una vista que hacía mucho tiempo no veía y no esperaba ver jamás. Miraba maravillada a mi alrededor a la vez que daba pasos lentos, Audrey a su vez estaba emocionada y sonreía ante la naturaleza que nos rodeaba. Estaba a punto de contestar al comentario de ella cuando se escuchó una voz, más como un gemido, sostuve con fuerza el hacha lista para soltar un golpe. Corrimos hacia un claro, teníamos una vista más amplia del lugar pero no lográbamos ver quién y qué podría ser lo que se acercaba.
Entonces algo salió de entre los matorrales y saltó hacia nosotras, el salto fue rápido casi imperceptible, solté un golpe con el hacha tan veloz como pude pero solo rasgó el aire. Me di la vuelta, Audrey no estaba a mis espaldas.Cayó sobre ella. Me sentí desesperada, pero antes de poder buscar a Audrey un par de caminantes se acercaron a mí; con el hacha partí en dos la cabeza de uno y el otro que estaba a un lado de mí lo empujé haciéndolo caer y repetí el golpe al cráneo que se despedazó en un instante.
Busqué a Audrey, quien estaba a unos cuantos metros, sentada en el suelo con un grupo de caminantes comiendo cerca de ella, -¡No!- susurré alarmada, por un momento pensé que ella era el objetivo alimenticio de esas cosas, me acerqué, ella me miró, nunca había visto esa expresión en su cara, parecía asustada, al borde del llanto. –Aléjate de ahí…- mi voz estaba temblorosa, no entendía lo que pasaba, lo importante era deshacernos de esos caminantes lo más pronto posible ahora que estaban ocupados alimentándose. No resultó difícil acabar con ellos, lo cual hice lo más pronto que pude, teníamos que salir de ahí.
Tomé la mano de Audrey, ella se puso de pie, entonces escuchamos una voz desconocida llamando un nombre que no nos era familiar “Eleonor”. Audrey me miró, ahora comprendía lo que estaba sucediendo, no solo había caminantes en este lugar, había sobrevivientes y por lo que vi hecho trizas en el suelo, Audrey se había hecho cargo de uno de ellos. –Tenemos que irnos, debemos avisarle a los demás. –Mi voz era casi inaudible. –No sabemos cuántos son, ni si podremos con ellos. – Quería irme, no quería enfrentar a seres humanos, aún quedaba en mí rasgos de ese sentido del deber que me había hecho querer ser policía hacía años y además se sumaba el miedo a disparar en contra de una persona viva que había adquirido después del incidente en la granja.
La voz se acercó cada vez más, al igual que unos pasos. Pero repentinamente la voz y los pasos se silenciaron con el sonido de unas detonaciones no muy lejos de donde nos encontrábamos. John, Emily y Charlotte estaban estacionando los vehículos cerca de donde ya habíamos limpiado el lugar de caminantes, así que pensé en Leon, enfrentándose a caminantes o personas. Miré a Audrey con preocupación. –Vamos.- Le dije con urgencia.
Robin Darcy- Puntos de experiencia : 249
Fecha de inscripción : 21/09/2012
Re: Trama I [Grupo Errantes II]: Declaración de Guerra
Emily parecía impactada por el hecho de estar a punto de morir, después de acabar con los caminantes me acerqué a ella y la abracé con fuerza -Tranquila, todo está bien- mencioné con la intención de calmarla para luego darle un beso en la frente.
El área estaba despejada y Leon nos daba las nuevas ordenes, el investigaría el observatorio para buscar cosas útiles, Audrey y Robin revisarían la zona, por último Emily, Charlotte y yo, nuestra tarea era ir por el otro vehículo y traerlo al estacionamiento así que recogí las flechas usadas y me dirigí a donde estaba el auto, -Emily, permanece detrás de mi, no quiero que esas cosas te hagan daño-. Caminamos lo más rápido que podíamos pues por el ruido causado por las armas no tardarían en aparecer más caminantes, mientras llegábamos al auto no hubo problema alguno tan solo un par de caminantes que asesino sin mayor problema.
Llegamos al auto, Charlotte lo manejo mientras yo me quedaba en los asientos traseros para confortar a Emily quien aun parecía aterrada, no tardamos mucho en llegar pues el camino en auto era más rápido. Arribamos al estacionamiento, salí del auto y cuando pensé que todo estaba bien unos disparos se escucharon dentro del observatorio, tomé mi ballesta, miré con preocupación a Emily y con voz desesperada mencione -Sé que acabas de tener un momento difícil, pero no sabemos si están en grave peligro, te necesito en este momento para poder ayudarlos-, ella parecía entender, tomó mi mano y nos dispusimos a ayudar a nuestros amigos.
Entramos al observatorio, todo estaba oscuro y no podía distinguir bien las cosas, Emily permanecía detrás mio cubriéndome la espalda, conforme avanzábamos me preocupaba más pues no encontrábamos a nuestros amigos y tenía miedo de que los hubieran asesinado, seguimos avanzando y de pronto pude ver la silueta de alguien corriendo pero no era una silueta conocida y los caminantes no corren de esa manera, intenté de calmarme y pensar que estaba equivocado pero voces desconocidas se empezaron a escuchar, era un hecho, en este lugar había sobrevivientes y al parecer no nos querían aquí.
El área estaba despejada y Leon nos daba las nuevas ordenes, el investigaría el observatorio para buscar cosas útiles, Audrey y Robin revisarían la zona, por último Emily, Charlotte y yo, nuestra tarea era ir por el otro vehículo y traerlo al estacionamiento así que recogí las flechas usadas y me dirigí a donde estaba el auto, -Emily, permanece detrás de mi, no quiero que esas cosas te hagan daño-. Caminamos lo más rápido que podíamos pues por el ruido causado por las armas no tardarían en aparecer más caminantes, mientras llegábamos al auto no hubo problema alguno tan solo un par de caminantes que asesino sin mayor problema.
Llegamos al auto, Charlotte lo manejo mientras yo me quedaba en los asientos traseros para confortar a Emily quien aun parecía aterrada, no tardamos mucho en llegar pues el camino en auto era más rápido. Arribamos al estacionamiento, salí del auto y cuando pensé que todo estaba bien unos disparos se escucharon dentro del observatorio, tomé mi ballesta, miré con preocupación a Emily y con voz desesperada mencione -Sé que acabas de tener un momento difícil, pero no sabemos si están en grave peligro, te necesito en este momento para poder ayudarlos-, ella parecía entender, tomó mi mano y nos dispusimos a ayudar a nuestros amigos.
Entramos al observatorio, todo estaba oscuro y no podía distinguir bien las cosas, Emily permanecía detrás mio cubriéndome la espalda, conforme avanzábamos me preocupaba más pues no encontrábamos a nuestros amigos y tenía miedo de que los hubieran asesinado, seguimos avanzando y de pronto pude ver la silueta de alguien corriendo pero no era una silueta conocida y los caminantes no corren de esa manera, intenté de calmarme y pensar que estaba equivocado pero voces desconocidas se empezaron a escuchar, era un hecho, en este lugar había sobrevivientes y al parecer no nos querían aquí.
John Taylor- Puntos de experiencia : 73
Fecha de inscripción : 21/09/2012
Re: Trama I [Grupo Errantes II]: Declaración de Guerra
Tenia todos los sentidos alertas pero mi cuerpo maldito era que no reaccionaba haciendo que me frustrara aun mas sintiendo primero el abrazo de Bry lo cual me reconforto de alguna manera tratando de decir palabras pero habia quedado tan impresionada debido a lo que sucedio que simplemente no supe que decir haciendo que mi mente se pusiera en blanco y solo entre-abriera mis labios pero de estos no salio palabra alguna, la mire por supuesto pero de alguna forma le señale que estaba asombrada aun.Luego fue John quien me abrazo y senti una sensacion bastante extraña muy dificil de describir en dichos momentos puesto que no se como pero mis brazos se alzaron y lo abrazaron escondiendo mi cabeza en su pecho sollozando en completo silencio, sintiendo las lagrimas acudir a mis ojos, algo extraño en estas cirscunstancias, lo se.
Sonrei vagamente a sus palabras mas no señale nada volviendo a la realidad misma escuchando a Leon y por mi lado mirando a los presentes quienes de alguna forma estaban bien por lo cual asenti a las palabras de John y junto a Charlotte nos fuimos hacia los coches para entrarlos mirando a mi alrededor algunos caminantes pero estaban bastantes lejos de nuestro alcanse por lo cual no seria de mucho problemas, aferrandome a la espalda de John cuando este mato a algunos de ellos para asi entrar al coche y finalmente partir hacia adentro aunque no sabia que rostro tenia pero John estaba aun tratando de calmarme cosa que sonrei un poco y me acurruque en su pecho entrecerrando los ojos por algunos momentos,-E-estare bien...-fue lo que logre articular sintiendo el coche detenerse y nos bajamos del mismo escuchando ruidos de disparos adentro haciendo que mi ceja se alzara de sobremanera mirando rapidamente y de forma fija a mi acompañante escuchando sus palabras un tanto desesperadas.
Para colmo no señale nada al respecto simplemente cogiendo su mano y casi lo arrastre hacia adentro ya que la preocupacion se hizo latente en mi cuerpo pensando en los muchachos y una vez adentro me coloque detras de John, pero no en sentido de cobardia, sino de que auto-defensa ya que mientras el caminaria hacia adelante viendo que no hubieran zombies, yo estaria atras cubriendole la espaldas con mi arma ya encañonada ante cualquier cosa pero al echar una rapida mirada hacia adelante y en un pequeño halo de luz que no sabria ver de donde provenia vi una silueta correr de un extremo a otro y achique mis ojos, ya que la oscuridad era tambien un problema, para observar bien escuchando de forma posterior voces un tanto alteradas y algunos ruidos mas deteniendome y apoyandome en una pared, aun sosteniendo el brazo de John,-Dime que escuchaste y viste lo mismo que yo, ya que no quiero volvereme lo...-no alcanse a completar la frase ya que una caminante con un vestido bastante feo a mi gusto junto a un delantal venia dispuesta a arrancarme alguna parte de mi cuerpo pero el gatillo se acciono antes de poder pensar y su cabeza de alguna forma no exploto pero si el punto en su sien hizo brotar bastante sangre, respirando hondamente y volviendome de forma seria hacia John, viendo las balas las cuales no me quedaban muchas,-Vamos...-murmure de forma queda para luego al ver el tono empleado en mi voz, me retracte y sonrei un poco apretandole el brazo lentamente.
Sonrei vagamente a sus palabras mas no señale nada volviendo a la realidad misma escuchando a Leon y por mi lado mirando a los presentes quienes de alguna forma estaban bien por lo cual asenti a las palabras de John y junto a Charlotte nos fuimos hacia los coches para entrarlos mirando a mi alrededor algunos caminantes pero estaban bastantes lejos de nuestro alcanse por lo cual no seria de mucho problemas, aferrandome a la espalda de John cuando este mato a algunos de ellos para asi entrar al coche y finalmente partir hacia adentro aunque no sabia que rostro tenia pero John estaba aun tratando de calmarme cosa que sonrei un poco y me acurruque en su pecho entrecerrando los ojos por algunos momentos,-E-estare bien...-fue lo que logre articular sintiendo el coche detenerse y nos bajamos del mismo escuchando ruidos de disparos adentro haciendo que mi ceja se alzara de sobremanera mirando rapidamente y de forma fija a mi acompañante escuchando sus palabras un tanto desesperadas.
Para colmo no señale nada al respecto simplemente cogiendo su mano y casi lo arrastre hacia adentro ya que la preocupacion se hizo latente en mi cuerpo pensando en los muchachos y una vez adentro me coloque detras de John, pero no en sentido de cobardia, sino de que auto-defensa ya que mientras el caminaria hacia adelante viendo que no hubieran zombies, yo estaria atras cubriendole la espaldas con mi arma ya encañonada ante cualquier cosa pero al echar una rapida mirada hacia adelante y en un pequeño halo de luz que no sabria ver de donde provenia vi una silueta correr de un extremo a otro y achique mis ojos, ya que la oscuridad era tambien un problema, para observar bien escuchando de forma posterior voces un tanto alteradas y algunos ruidos mas deteniendome y apoyandome en una pared, aun sosteniendo el brazo de John,-Dime que escuchaste y viste lo mismo que yo, ya que no quiero volvereme lo...-no alcanse a completar la frase ya que una caminante con un vestido bastante feo a mi gusto junto a un delantal venia dispuesta a arrancarme alguna parte de mi cuerpo pero el gatillo se acciono antes de poder pensar y su cabeza de alguna forma no exploto pero si el punto en su sien hizo brotar bastante sangre, respirando hondamente y volviendome de forma seria hacia John, viendo las balas las cuales no me quedaban muchas,-Vamos...-murmure de forma queda para luego al ver el tono empleado en mi voz, me retracte y sonrei un poco apretandole el brazo lentamente.
Emily L. Wheeler- Puntos de experiencia : 331
Fecha de inscripción : 10/10/2012
Localización : Sidney, Australia
Re: Trama I [Grupo Errantes II]: Declaración de Guerra
Otros tres disparos atravesaron el escritorio sin darme, aunque una de ellas paso lo suficientemente cerca como para causarme una cortada en el rostro, ahogue un poco el quejido y justo en ese momento por debajo del escritorio logre ver como una persona se iba acercando a mi posición mientras otro disparo atravesaba la madera “Maldita sea…” me arrastre hasta el lado contrario del escritorio y mire al techo un momento, llegue a la conclusión que debía elegir, rendirme y esperar a que todo esto se solucionase como un simple mal entendido o simplemente atacar, como persona aun creía que la humanidad era importante, pero por otro lado…llegamos tan lejos, sufrimos tanto, quizás mas que estas personas que han tenido resguardo todo el tiempo, luchamos contra otros grupos, perdimos miembros del grupo, estábamos muy cansados, si decidíamos respetar este sitio significaría dejar el único lugar seguro en tiempo, ¿podía yo hacer eso?, ¿podía darles la cara y decirles a todos que les había fallado de nuevo?, ¿podía simplemente decirles que no teníamos otro sitio a dónde ir?, ya casi no teníamos alimentos, debíamos reabastecer gasolina, dormir…tenía que encontrarles un sitio seguro, necesitábamos este lugar…más aun, ahora mismo necesitaba saber que Bryd y los otros estaban bien.
Fue por esto que tome la decisión, no más huir, no más decirles a los demás que no tenía un lugar seguro para ellos, no más fingir que el mundo era como antes, no más amabilidad…la amabilidad no nos ha llevado a ningún lado, solamente nos ha traído problemas, a causa de nuestra amabilidad perdí mi brazo…a causa de nuestra amabilidad murieron personas del grupo…a causa de mi amabilidad Bryd casi muere en esa colina -Nunca más…- susurre y con rabia tras escuchar un disparo atravesando el escritorio me levante viendo frente a mí a un hombre negro que cargaba un azadón, este al verme elevo su arma pero tarde, una bala certera atravesó su cráneo y antes de que pudiesen reaccionar tres disparos dieron en el pecho de una mujer más cerca matándola, el hombre con el arma me apunto disparando dos veces pero me lance al suelo evitando las balas, los otros cuatro se ocultaron protegiéndose “Novatos…” aunque tenían experiencia en matar caminantes no significaba que tuviesen experiencia contra seres vivos, yo más que nadie la tenía…en la fuerza mate criminales…esto ahora mismo para mí no era distinto, tan fácil como decir…ellos o nosotros.
Desde el suelo apunte en dirección al telescopio, cuando el hombre emergió dos balas le entraron en el rostro mientras su disparo me fallaba por lo mismo, ya no tenía balas en el revólver y aparentemente un viejo lo sabía porque emergió de atrás de una pared corriendo en mi contra con un machete, yo simplemente saque mi pistola y tres disparos le dieron en el pecho, cuello y frente matándolo. Me levante rápido y los tres restantes comenzaron a correr, dispare matando a una jovencita de unos dieciséis años por la espalda, una mujer y otro muchacho se me lograron escabullir así que comencé a darles caza, no sin antes darle una bala en la cabeza a aquellos que mate sin dar en ese punto. Llegue a un pasillo lateral y avance hasta que repentinamente una puerta se abrió golpeándome, para cuando me di cuenta la mujer estaba encima de mi enterrándome una pequeña navaja en el hombro derecho haciéndome gritar y ordenándole al muchacho que corriese, trate de tomar mi arma pero ella me sostuvo la mano y sacando su navaja trato de enterrarla de nuevo esta vez en mi cabeza, logre reaccionar dándole un cabezazo rompiéndole la nariz y derrumbándola lo suficiente para sacar mi cuchillo aunque ella aun así logro enterrarme aquella navaja en la pierna derecha, más en lugar de quejarme solo bufé de coraje y con mi arma blanca se la enterré en la nuca matándola. Me puse de pie retomando mi pistola y avance por el pasillo a donde el chico había corrido, pasaron uno o dos minutos hasta que vi al joven como buscando un arma, mas al verme echo a correr de nuevo por otro pasillo -¡Ven acá!- grite moviéndome lo más rápido que podía dándole caza.
Aparentemente aquel pasillo daba a una cancha recreativa pues abrió ambas puertas viéndose un pequeño terreno para jugar baloncesto rodeado de unas cuantas rejas para evitar que alguien entrase por allí, justo en ese momento el pobre diablo se dio cuenta que en aquella parte había unos veinte caminantes quienes al verle avanzaron en su contra, este retrocedió tratando de regresar pero justo en ese momento llegue yo para atrancar las puertas mirándole desde atrás de la ventanilla, este comenzó a golpear con fuerza ordenándome que le dejase entrar y hasta insultándome, yo simplemente le mire y viendo a los caminantes acercarse le comente con claridad -Espero que sepas luchar sin armas chico…porque aquí correr no te servirá- en ese momento gritándome con desesperación me pregunto porque lo hacía -¿Porque?- me di la vuelta y avance de regreso -Porque esto ya es una declaración de guerra…- tarde varios minutos en regresar hasta la entrada sin ver a ninguno de los otros miembros, quizás me quede ahí uno o dos minutos hasta que escuche un sonido proveniente de un pasillo, apunte con la pistola pero la baje cuando vi ahí a Bryd, tenía rastros de sangre aunque no se veía herida -¿Estas bien Bryd?- pregunte, estaba un poco trastornado, acababa de matar a siete seres humanos…no, eso no fue así…yo no los mate…ellos se mataron solos al obligarme a elegir…eran ellos o nosotros, no hay más que argumentar.
Fue por esto que tome la decisión, no más huir, no más decirles a los demás que no tenía un lugar seguro para ellos, no más fingir que el mundo era como antes, no más amabilidad…la amabilidad no nos ha llevado a ningún lado, solamente nos ha traído problemas, a causa de nuestra amabilidad perdí mi brazo…a causa de nuestra amabilidad murieron personas del grupo…a causa de mi amabilidad Bryd casi muere en esa colina -Nunca más…- susurre y con rabia tras escuchar un disparo atravesando el escritorio me levante viendo frente a mí a un hombre negro que cargaba un azadón, este al verme elevo su arma pero tarde, una bala certera atravesó su cráneo y antes de que pudiesen reaccionar tres disparos dieron en el pecho de una mujer más cerca matándola, el hombre con el arma me apunto disparando dos veces pero me lance al suelo evitando las balas, los otros cuatro se ocultaron protegiéndose “Novatos…” aunque tenían experiencia en matar caminantes no significaba que tuviesen experiencia contra seres vivos, yo más que nadie la tenía…en la fuerza mate criminales…esto ahora mismo para mí no era distinto, tan fácil como decir…ellos o nosotros.
Desde el suelo apunte en dirección al telescopio, cuando el hombre emergió dos balas le entraron en el rostro mientras su disparo me fallaba por lo mismo, ya no tenía balas en el revólver y aparentemente un viejo lo sabía porque emergió de atrás de una pared corriendo en mi contra con un machete, yo simplemente saque mi pistola y tres disparos le dieron en el pecho, cuello y frente matándolo. Me levante rápido y los tres restantes comenzaron a correr, dispare matando a una jovencita de unos dieciséis años por la espalda, una mujer y otro muchacho se me lograron escabullir así que comencé a darles caza, no sin antes darle una bala en la cabeza a aquellos que mate sin dar en ese punto. Llegue a un pasillo lateral y avance hasta que repentinamente una puerta se abrió golpeándome, para cuando me di cuenta la mujer estaba encima de mi enterrándome una pequeña navaja en el hombro derecho haciéndome gritar y ordenándole al muchacho que corriese, trate de tomar mi arma pero ella me sostuvo la mano y sacando su navaja trato de enterrarla de nuevo esta vez en mi cabeza, logre reaccionar dándole un cabezazo rompiéndole la nariz y derrumbándola lo suficiente para sacar mi cuchillo aunque ella aun así logro enterrarme aquella navaja en la pierna derecha, más en lugar de quejarme solo bufé de coraje y con mi arma blanca se la enterré en la nuca matándola. Me puse de pie retomando mi pistola y avance por el pasillo a donde el chico había corrido, pasaron uno o dos minutos hasta que vi al joven como buscando un arma, mas al verme echo a correr de nuevo por otro pasillo -¡Ven acá!- grite moviéndome lo más rápido que podía dándole caza.
Aparentemente aquel pasillo daba a una cancha recreativa pues abrió ambas puertas viéndose un pequeño terreno para jugar baloncesto rodeado de unas cuantas rejas para evitar que alguien entrase por allí, justo en ese momento el pobre diablo se dio cuenta que en aquella parte había unos veinte caminantes quienes al verle avanzaron en su contra, este retrocedió tratando de regresar pero justo en ese momento llegue yo para atrancar las puertas mirándole desde atrás de la ventanilla, este comenzó a golpear con fuerza ordenándome que le dejase entrar y hasta insultándome, yo simplemente le mire y viendo a los caminantes acercarse le comente con claridad -Espero que sepas luchar sin armas chico…porque aquí correr no te servirá- en ese momento gritándome con desesperación me pregunto porque lo hacía -¿Porque?- me di la vuelta y avance de regreso -Porque esto ya es una declaración de guerra…- tarde varios minutos en regresar hasta la entrada sin ver a ninguno de los otros miembros, quizás me quede ahí uno o dos minutos hasta que escuche un sonido proveniente de un pasillo, apunte con la pistola pero la baje cuando vi ahí a Bryd, tenía rastros de sangre aunque no se veía herida -¿Estas bien Bryd?- pregunte, estaba un poco trastornado, acababa de matar a siete seres humanos…no, eso no fue así…yo no los mate…ellos se mataron solos al obligarme a elegir…eran ellos o nosotros, no hay más que argumentar.
Leon O. Cole- Puntos de experiencia : 218
Fecha de inscripción : 20/09/2012
Re: Trama I [Grupo Errantes II]: Declaración de Guerra
Todo comenzaba a pasar muy rápido y aún no reaccionaba como debía, pues el saber que había matado a una persona, hacía que un gran escalofrío corriera por mi espalda, y cuando lo noté ya estaba corriendo tomada de la mano de Robin, ni siquiera supe en que momento ella me tomó de la mano para comenzar a correr.
Mientras corríamos mi mirada seguía perdida, veía pero no prestaba atención, solo a la voz que atrás de nosotras resonaba gritando con enojo, seguramente había visto a su compañera muerta lo cual hizo que apretara mas la mano de Robin inconscientemente. Entonces unos pasos se escucharon resonar tras de nosotros y supe que esa persona estaba siguiéndonos, seguramente también podía escuchar el sonido de nuestras suelas al dar un paso, seguramente nos culpaba de la muerte de "Eleonor" e incluso, seguramente buscaba vengarse de ello.
Entonces recordé aquella noche cuando fuimos por medicamentos a una cabaña, cuando nos encontramos con un grupo que amenazó también con dispararnos a nosotros, pero aquella noche no paso nada pues los caminantes intervinieron, aunque la diferencia de aquella noche con este día era el hecho de que esta vez si estábamos enfrentándonos con los vivos en lugar de huir de los muertos.
Así fue que de un momento a otro Robin y yo caímos al suelo pues una detonación hizo que intentáramos agacharnos. La bala rebotó en una pared dejando un agujero y mi rostro se giró para ver el lugar de donde provenía la detonación. Estaba asustada, pues una sombra comenzó a acercarse seguida de la persona dueña de aquella sombra. Tenía miedo, y no sabía si Robin lo tenía igual que yo, pero ahora estaba segura de algo, que aquella persona buscaría terminar con nosotras así como yo lo hice con su compañera.
Escuché el click del seguro de su arma y sabía que estaba listo para dispar. Tenía tanto miedo, pero sabía que no podía dejar simplemente que el acabara con nosotros, habíamos pasado tanto... Intentábamos buscar un lugar donde vivir, la muerte de su compañera solo fue el resultado catastrófico de algo que no se podía evitar, ¿cómo podía saber yo que un humano me iba a atacar? además, el ataque vino primero de ellos, si.. si en vez de eso solo hubiéramos hablado. Pero parecía que este mundo se había vuelto primitivo, pues gracias a la necesidad de sobrevivir el hablar era algo obsoleto.
Los pasos de aquella persona se escuchaban más fuertes conforme caminaba hacia nosotros y aunque intentamos levantarnos para correr algo dentro de mi sabía que no podía dejarlo pasar más allá, era él o nosotras. Así que antes de que Robin me dijera algo, antes de que alguien me detuviera tomé mi arma con un ligero temblor en mis manos y luego simplemente apunté a la nada, esperando a que aquella persona se apareciera al dar vuelta en el pasillo.
Tenía ventaja visual, pues al menos lo vería cuando el diera la vuelta por aquella esquina, y así fue, pues por aquí vi su rostro mi dedo jalo el gatillo, la bala dio en su hombro y aquel chico -que parecía ser mas joven que yo- cayó al suelo por el dolor tirando el arma que llevaba. Sin dudarlo volví a disparar dando en su pecho dos veces y luego en su cabeza terminando con él.
Quede inmóvil un momento y mis piernas las sentía temblar. « Dos... » Fue lo único que pensé sintiendo como alguien quitaba el arma de mis manos pues no dejaba de apuntar hacia donde estaba el chico.
Después de ello algo tomo nuevamente de mi brazo y comenzamos a avanzar más lento mientras mi mirada no perdía de vista a aquella persona. Ahora que lo recuerdo, alguna vez también apunte a alguien con un arma, a aquel chico que me encontré en un almacén y pensó que accedería a "divertirme" con él. Aquella vez no me atreví a dispararle, por eso deje entrar caminantes al lugar a pesar de que mi vida corrió peligro por aquella acción. Pero esta vez lo había conseguido, disparé ante la "amenaza" pero ello no me hacía sentir bien, es mas ahora tenía mas miedo, pero no de los caminantes ni de las amenazas que podrían atacarnos, si no de mi misma.
Continuamos caminando hasta que llegamos a la entrada donde Leon nos esperaba. Al verlo noté que se acercaba a mi preguntándome si estaba bien, cosa irónica, pues aunque físicamente lo estaba, emocionalmente no, a lo cual me abracé a él comenzando a llorar sin poder pronunciar palabra alguna.
Mientras corríamos mi mirada seguía perdida, veía pero no prestaba atención, solo a la voz que atrás de nosotras resonaba gritando con enojo, seguramente había visto a su compañera muerta lo cual hizo que apretara mas la mano de Robin inconscientemente. Entonces unos pasos se escucharon resonar tras de nosotros y supe que esa persona estaba siguiéndonos, seguramente también podía escuchar el sonido de nuestras suelas al dar un paso, seguramente nos culpaba de la muerte de "Eleonor" e incluso, seguramente buscaba vengarse de ello.
Entonces recordé aquella noche cuando fuimos por medicamentos a una cabaña, cuando nos encontramos con un grupo que amenazó también con dispararnos a nosotros, pero aquella noche no paso nada pues los caminantes intervinieron, aunque la diferencia de aquella noche con este día era el hecho de que esta vez si estábamos enfrentándonos con los vivos en lugar de huir de los muertos.
Así fue que de un momento a otro Robin y yo caímos al suelo pues una detonación hizo que intentáramos agacharnos. La bala rebotó en una pared dejando un agujero y mi rostro se giró para ver el lugar de donde provenía la detonación. Estaba asustada, pues una sombra comenzó a acercarse seguida de la persona dueña de aquella sombra. Tenía miedo, y no sabía si Robin lo tenía igual que yo, pero ahora estaba segura de algo, que aquella persona buscaría terminar con nosotras así como yo lo hice con su compañera.
Escuché el click del seguro de su arma y sabía que estaba listo para dispar. Tenía tanto miedo, pero sabía que no podía dejar simplemente que el acabara con nosotros, habíamos pasado tanto... Intentábamos buscar un lugar donde vivir, la muerte de su compañera solo fue el resultado catastrófico de algo que no se podía evitar, ¿cómo podía saber yo que un humano me iba a atacar? además, el ataque vino primero de ellos, si.. si en vez de eso solo hubiéramos hablado. Pero parecía que este mundo se había vuelto primitivo, pues gracias a la necesidad de sobrevivir el hablar era algo obsoleto.
Los pasos de aquella persona se escuchaban más fuertes conforme caminaba hacia nosotros y aunque intentamos levantarnos para correr algo dentro de mi sabía que no podía dejarlo pasar más allá, era él o nosotras. Así que antes de que Robin me dijera algo, antes de que alguien me detuviera tomé mi arma con un ligero temblor en mis manos y luego simplemente apunté a la nada, esperando a que aquella persona se apareciera al dar vuelta en el pasillo.
Tenía ventaja visual, pues al menos lo vería cuando el diera la vuelta por aquella esquina, y así fue, pues por aquí vi su rostro mi dedo jalo el gatillo, la bala dio en su hombro y aquel chico -que parecía ser mas joven que yo- cayó al suelo por el dolor tirando el arma que llevaba. Sin dudarlo volví a disparar dando en su pecho dos veces y luego en su cabeza terminando con él.
Quede inmóvil un momento y mis piernas las sentía temblar. « Dos... » Fue lo único que pensé sintiendo como alguien quitaba el arma de mis manos pues no dejaba de apuntar hacia donde estaba el chico.
Después de ello algo tomo nuevamente de mi brazo y comenzamos a avanzar más lento mientras mi mirada no perdía de vista a aquella persona. Ahora que lo recuerdo, alguna vez también apunte a alguien con un arma, a aquel chico que me encontré en un almacén y pensó que accedería a "divertirme" con él. Aquella vez no me atreví a dispararle, por eso deje entrar caminantes al lugar a pesar de que mi vida corrió peligro por aquella acción. Pero esta vez lo había conseguido, disparé ante la "amenaza" pero ello no me hacía sentir bien, es mas ahora tenía mas miedo, pero no de los caminantes ni de las amenazas que podrían atacarnos, si no de mi misma.
Continuamos caminando hasta que llegamos a la entrada donde Leon nos esperaba. Al verlo noté que se acercaba a mi preguntándome si estaba bien, cosa irónica, pues aunque físicamente lo estaba, emocionalmente no, a lo cual me abracé a él comenzando a llorar sin poder pronunciar palabra alguna.
Audrey O'Brien- Puntos de experiencia : 241
Fecha de inscripción : 20/09/2012
Localización : Sydney
Re: Trama I [Grupo Errantes II]: Declaración de Guerra
Mientras andábamos no dejaba de soltar la mano de Audrey, pero ella seguía en silencio, sin mirar a ningún lado, la voz sonaba más cerca y furiosa; al parecer esa persona “Eleonor” era la que los caminantes devoraban momentos antes junto a Audrey; no la culpé, no le pregunté nada, sabía las circunstancias y lo difícil que seguramente estaba siendo para ella, lidiar con esa culpa en estos momentos, yo estaría igual… tal vez peor, no pensé más. Ella apretó mi mano con fuerza.
Comenzaron los disparos cerca de nosotros, nos agachamos pero al hacer dicho movimiento caímos al suelo. Mi arma, la sostuve con fuerza, temblando, Audrey estaba delante de mí y unos pasos se acercaban, ambas nos paralizamos, “Muévete. Muévete. Muévete” mis cuerpo no respondía. Un clic proveniente de un arma que no era nuestra resonó por el pasillo, los pasos se escuchaban en un eco. “Muévete. Muévete. Muévete” Levanté el revólver.
Un disparo resonó por el pasillo. Cerré los ojos con fuerza. Fui cobarde, esperé mi muerte, esperé reencontrarme con aquella persona que ya había dado por muerta. Y por un segundo que parecieron horas acepté lo que me deparaba. Pero no fue así, escuché más disparos y un golpe seco cerca de mí, abrí rápidamente los ojos, miré a Audrey, temblaba de pies a cabeza y su mirada estaba fija en el cadáver de un hombre frente a nosotras, el que estuvo a punto de matarnos, quien conocía a aquella persona Eleonor quien minutos antes había muerto también en manos de ella, ella quien aún sostenía el arma apuntando a ese cuerpo sin vida. Yo respiraba agitadamente, acerqué mis manos a las de ella, para que bajara el arma. Me puse de pie lentamente y la apoyé para que ella hiciera lo mismo.
Por un momento olvidé a todos los demás, olvidé los disparos que habíamos escuchado antes, solamente caminamos en silencio hasta llegar al lugar donde Leon nos esperaba, noté algunas heridas en su cuerpo. Él se acercó a Audrey, en la mirada de él había algo que no había visto antes, una especie de euforia extraña, entonces comprendí los disparos anteriores. Me alejé de ellos dando unos pasos hacia atrás, me sentí culpable por no haber ayudado, pero cobarde por no haber podido ayudar, por quedar inmóvil, por desear la muerte y permitir que Audrey pasara por el dolor de asesinar a dos personas. Por un momento me sentí absolutamente sola y mis ojos comenzaron arder, me di la vuelta y oculté mi rostro. No dije nada, solo esperé a escuchar lo que Leon tuviera que decir, que habían sobrevivientes en este lugar, que él se había hecho cargo de ellos, era lo más seguro.
Comenzaron los disparos cerca de nosotros, nos agachamos pero al hacer dicho movimiento caímos al suelo. Mi arma, la sostuve con fuerza, temblando, Audrey estaba delante de mí y unos pasos se acercaban, ambas nos paralizamos, “Muévete. Muévete. Muévete” mis cuerpo no respondía. Un clic proveniente de un arma que no era nuestra resonó por el pasillo, los pasos se escuchaban en un eco. “Muévete. Muévete. Muévete” Levanté el revólver.
Un disparo resonó por el pasillo. Cerré los ojos con fuerza. Fui cobarde, esperé mi muerte, esperé reencontrarme con aquella persona que ya había dado por muerta. Y por un segundo que parecieron horas acepté lo que me deparaba. Pero no fue así, escuché más disparos y un golpe seco cerca de mí, abrí rápidamente los ojos, miré a Audrey, temblaba de pies a cabeza y su mirada estaba fija en el cadáver de un hombre frente a nosotras, el que estuvo a punto de matarnos, quien conocía a aquella persona Eleonor quien minutos antes había muerto también en manos de ella, ella quien aún sostenía el arma apuntando a ese cuerpo sin vida. Yo respiraba agitadamente, acerqué mis manos a las de ella, para que bajara el arma. Me puse de pie lentamente y la apoyé para que ella hiciera lo mismo.
Por un momento olvidé a todos los demás, olvidé los disparos que habíamos escuchado antes, solamente caminamos en silencio hasta llegar al lugar donde Leon nos esperaba, noté algunas heridas en su cuerpo. Él se acercó a Audrey, en la mirada de él había algo que no había visto antes, una especie de euforia extraña, entonces comprendí los disparos anteriores. Me alejé de ellos dando unos pasos hacia atrás, me sentí culpable por no haber ayudado, pero cobarde por no haber podido ayudar, por quedar inmóvil, por desear la muerte y permitir que Audrey pasara por el dolor de asesinar a dos personas. Por un momento me sentí absolutamente sola y mis ojos comenzaron arder, me di la vuelta y oculté mi rostro. No dije nada, solo esperé a escuchar lo que Leon tuviera que decir, que habían sobrevivientes en este lugar, que él se había hecho cargo de ellos, era lo más seguro.
Robin Darcy- Puntos de experiencia : 249
Fecha de inscripción : 21/09/2012
Re: Trama I [Grupo Errantes II]: Declaración de Guerra
No llegué a pensar que en algún momento me sentiría tan bien con el simple hecho de 'atropellar' a alguien, pero ver como una tras otra de esas cosas eran aplastadas por la autocaravana me hicieron sentir aliviada, al menos sería una carga menos para el resto. Después de haber acatado las órdenes de Leon, frené el vehículo. Leon dio la orden de que los demás atacaran contra los caminantes que aún se mantenían en pie -literalmente, ya que visualicé uno que iba arrastrándose con tan de buscar alimento- mientras yo me quedaba en el vehículo. No hice otra cosa mas que asentir, conforme los demás saláin del auto.
En aquél breve lapso aproveché para pensar un poco en todos los hechos que habían ocurrido. Aquella vez en la que habíamos pensado que encontraríamos algo de estabilidad refugiándonos en el hogar de aquella amable pareja hace ya bastantes días, lamentaba los sucesos que ocurrieron después de eso. Todo se había desvanecido en un instante, huímos con lo que se pudo y una de las maletas repletas que está a mis pies era la prueba de eso. Eran los medicamentos que bien estábamos administrando para todo el grupo, incluso para la pareja que nos auxilió. Uno ayuda con lo que se puede, en mi caso presté mis servicios a base de los conocimientos de medicina con los que contaba y a cambio en aquella casa fue que obtuve materiales como el estetoscopio y el baumanómetro que también estaban dentro de la maleta.
El golpe brusco en la ventana me devolvió a la realidad. Era uno de esos caminantes, con la mitad de la mandíbula destrozada y con la apariencia tan escandalosa que los caracterizaba. Tomé un cuchillo, bajé la ventanilla y bastó con un simple golpe directo para que aquél cuerpo cayera inmóvil - Mala suerte - susurré y volví a subir la ventanilla. Me recargué en el asiento, procurando no hacer más grande todo este alboroto pues podríamos atraer a los caminantes que estuviesen a la redonda.
No sé cuanto tiempo habrá pasado, pero ahora veía a John y a Emily dirigirse hacia el vehículo otra vez ¿dónde estaba el resto? Ambos subieron, y tras saber cuales habían sido las indicaciones me apresuré acatarlas. Mientras manejaba hacia el estacionamiento - a punto de llegar ahí - se escucharon disparos. Lo primero que pensé es que probablemente en el interior habría caminantes pero después descarté esa idea, sé que para acabar con ellos a lo primero que recurriríamos sería a utilizar cuchillos o espadas para evitar gastar las municiones y atraer mas caminantes.
John y Emily volvieron a salir del auto, cosa que fue lo más oportuno para la situación. Yo había tomado mi revólver y la espada para ir tras ellos, inclusive hasta me había bajado del auto, pero al ver en la cercanía que unos caminantes se aproximaban decidí quedarme atrás para hacer un poco de limpieza en caso de que este sitio se convirtiera en nuestro próximo 'hogar'.
En aquél breve lapso aproveché para pensar un poco en todos los hechos que habían ocurrido. Aquella vez en la que habíamos pensado que encontraríamos algo de estabilidad refugiándonos en el hogar de aquella amable pareja hace ya bastantes días, lamentaba los sucesos que ocurrieron después de eso. Todo se había desvanecido en un instante, huímos con lo que se pudo y una de las maletas repletas que está a mis pies era la prueba de eso. Eran los medicamentos que bien estábamos administrando para todo el grupo, incluso para la pareja que nos auxilió. Uno ayuda con lo que se puede, en mi caso presté mis servicios a base de los conocimientos de medicina con los que contaba y a cambio en aquella casa fue que obtuve materiales como el estetoscopio y el baumanómetro que también estaban dentro de la maleta.
El golpe brusco en la ventana me devolvió a la realidad. Era uno de esos caminantes, con la mitad de la mandíbula destrozada y con la apariencia tan escandalosa que los caracterizaba. Tomé un cuchillo, bajé la ventanilla y bastó con un simple golpe directo para que aquél cuerpo cayera inmóvil - Mala suerte - susurré y volví a subir la ventanilla. Me recargué en el asiento, procurando no hacer más grande todo este alboroto pues podríamos atraer a los caminantes que estuviesen a la redonda.
No sé cuanto tiempo habrá pasado, pero ahora veía a John y a Emily dirigirse hacia el vehículo otra vez ¿dónde estaba el resto? Ambos subieron, y tras saber cuales habían sido las indicaciones me apresuré acatarlas. Mientras manejaba hacia el estacionamiento - a punto de llegar ahí - se escucharon disparos. Lo primero que pensé es que probablemente en el interior habría caminantes pero después descarté esa idea, sé que para acabar con ellos a lo primero que recurriríamos sería a utilizar cuchillos o espadas para evitar gastar las municiones y atraer mas caminantes.
John y Emily volvieron a salir del auto, cosa que fue lo más oportuno para la situación. Yo había tomado mi revólver y la espada para ir tras ellos, inclusive hasta me había bajado del auto, pero al ver en la cercanía que unos caminantes se aproximaban decidí quedarme atrás para hacer un poco de limpieza en caso de que este sitio se convirtiera en nuestro próximo 'hogar'.
Charlotte Giudice- Puntos de experiencia : 247
Fecha de inscripción : 21/10/2012
Localización : Tan cerca pero tan lejos de la muerte.
Re: Trama I [Grupo Errantes II]: Declaración de Guerra
No podía ver nada, todo estaba muy obscuro y tan solo escuchaba disparos por todas partes, Emily se deshizo de un caminante que se acercaba a ella para después volver hacia a mi y estar dispuesta a seguir.
Trate de seguir el sonido de los disparos pero con algo de cautela para no resultar herido por una bala perdida, llegamos a un lugar donde se veían muchas sombras, le dije a Emily que permaneciéramos ocultos pues esas personas estaban disparando a diestra y siniestra, una de esas sombras me parecía conocida, al parecer Leon se estaba enfrentando a ellos y para mi sorpresa lo estaba haciendo muy bien, en tan solo unos minutos había acabado con todos ellos por lo cual no tuvimos que gastar municiones.
Por un momento creí que lo que estábamos haciendo era algo cruel, esas personas al parecer tenían mucho tiempo viviendo en el observatorio y quizá les costo mucho trabajo hacerse de este lugar y nosotros de un momento a otro llegamos como unos ladrones y les quitamos su único hogar asesinándolos a sangre fría, pero después de pensarlo bien nosotros necesitamos un hogar y Leon no los hubiera atacado sin razón alguna, así que seguramente ellos se lo ganaron, nosotros tan solo nos defendimos.
Leon parecía salir del lugar así que me dispuse a hacer lo mismo -Ven Emily, vayamos afuera puede que más caminantes se estén acerando-, nos dirigimos a la salida y al llegar todos estaban ahí, me alegro verlos bien o al menos físicamente pues Audrey parecía algo afectada.
Trate de seguir el sonido de los disparos pero con algo de cautela para no resultar herido por una bala perdida, llegamos a un lugar donde se veían muchas sombras, le dije a Emily que permaneciéramos ocultos pues esas personas estaban disparando a diestra y siniestra, una de esas sombras me parecía conocida, al parecer Leon se estaba enfrentando a ellos y para mi sorpresa lo estaba haciendo muy bien, en tan solo unos minutos había acabado con todos ellos por lo cual no tuvimos que gastar municiones.
Por un momento creí que lo que estábamos haciendo era algo cruel, esas personas al parecer tenían mucho tiempo viviendo en el observatorio y quizá les costo mucho trabajo hacerse de este lugar y nosotros de un momento a otro llegamos como unos ladrones y les quitamos su único hogar asesinándolos a sangre fría, pero después de pensarlo bien nosotros necesitamos un hogar y Leon no los hubiera atacado sin razón alguna, así que seguramente ellos se lo ganaron, nosotros tan solo nos defendimos.
Leon parecía salir del lugar así que me dispuse a hacer lo mismo -Ven Emily, vayamos afuera puede que más caminantes se estén acerando-, nos dirigimos a la salida y al llegar todos estaban ahí, me alegro verlos bien o al menos físicamente pues Audrey parecía algo afectada.
John Taylor- Puntos de experiencia : 73
Fecha de inscripción : 21/09/2012
Re: Trama I [Grupo Errantes II]: Declaración de Guerra
El momento era bastante tensional debido a los disparos y algunos gritos que claramente no eran zombies ya que estos solamente lanzaban gruñidos y gemidos lastimeros aunque de lastima no tenian nada ya que eran mas los primeros que segundo pero bueno era mejor no pensar en eso debido a que el solo pensar en aquello me causaban nauseas, sobre todo cuando los mataba a sangre fria.
Luego de matar a esa cosa me voltee hacia John asintiendo cuando me señalo que permanecieramos juntos eh avanzamos de forma lenta y suave por los pasillos hasta que de un derepente los disparos cesaron ocasionando preocupacion por mi ya que no sabia quien habia ganado, pero me habia parecido que nuestro grupo gano, y aquello lo reafirmo cuando vi a Leon quien ya se iba a la salida ocasionando que me sintiera mucho mas mejor.
-Si, es mejor ayudar ante cualquier emergencia-Juntos nos dirigimos a la salida y cuando asi sucedio vimos a todos nuestros compañeros sonriendo de forma mas calmada y relajada dejando que todos los nervios de alguna forma se disiparan pero al ver a Aubrey mi corazon por un momento se paralizo, ya que su rostro estaba palido y tenia rastros de haber llorado, mi cuerpo se quedo estatico abrazandome del brazo de John, pero mi mente y voluntad deseaban ir a ver que rayos sucedia por lo que arrastre un tanto a John hacia ellos y les sonrei a cada uno de ellos para luego mirar a lo lejos algunos de aquellos solitarios caminantes andar de alla para aca, pero sin crear una amenaza para nosotros, aunque de alli me acorde de algo por lo que mis cejas de alguna forma se arquearon y mire de forma interrogante a Leon.
-¿Quienes eran esas personas?, rayos estas herido...-era mas que obvio al ver a Leon asi pero era mejor preguntar de todas formas y estar segura de antemano por lo cual suspire y mire de reojo a John y luego nuevamente a Leon a la espera de su respuesta.
Luego de matar a esa cosa me voltee hacia John asintiendo cuando me señalo que permanecieramos juntos eh avanzamos de forma lenta y suave por los pasillos hasta que de un derepente los disparos cesaron ocasionando preocupacion por mi ya que no sabia quien habia ganado, pero me habia parecido que nuestro grupo gano, y aquello lo reafirmo cuando vi a Leon quien ya se iba a la salida ocasionando que me sintiera mucho mas mejor.
-Si, es mejor ayudar ante cualquier emergencia-Juntos nos dirigimos a la salida y cuando asi sucedio vimos a todos nuestros compañeros sonriendo de forma mas calmada y relajada dejando que todos los nervios de alguna forma se disiparan pero al ver a Aubrey mi corazon por un momento se paralizo, ya que su rostro estaba palido y tenia rastros de haber llorado, mi cuerpo se quedo estatico abrazandome del brazo de John, pero mi mente y voluntad deseaban ir a ver que rayos sucedia por lo que arrastre un tanto a John hacia ellos y les sonrei a cada uno de ellos para luego mirar a lo lejos algunos de aquellos solitarios caminantes andar de alla para aca, pero sin crear una amenaza para nosotros, aunque de alli me acorde de algo por lo que mis cejas de alguna forma se arquearon y mire de forma interrogante a Leon.
-¿Quienes eran esas personas?, rayos estas herido...-era mas que obvio al ver a Leon asi pero era mejor preguntar de todas formas y estar segura de antemano por lo cual suspire y mire de reojo a John y luego nuevamente a Leon a la espera de su respuesta.
Emily L. Wheeler- Puntos de experiencia : 331
Fecha de inscripción : 10/10/2012
Localización : Sidney, Australia
Re: Trama I [Grupo Errantes II]: Declaración de Guerra
Una vez que Bryd llego solamente se acercó hasta donde estaba y me abrazo sin decir nada, comenzó a llorar y entonces comprendí que ella también se enfrentó con alguna persona, sabia lo duro que era, recuerdo la primera vez que mate a un humano, fue mucho antes de todo esto, apenas unos días después de mi entrada al pelotón recibimos una llamada, habían descubierto a unos locos talibanes que buscaban formular una bomba casera, tuvimos que trasladarnos hasta el sitio para brindar apoyo a otros escuadrones, me encargaron vigilar la salida trasera pues era la única salida pero dudaban que los talibanes la tomasen, ellos eran más famosos por optar por el suicidio o cosa similar, para que la historia no sea larga, simplemente diré que uno de ellos salió, un muchacho, quizás de diecinueve años, asustado y todo sudado, con un atuendo deprimente, le ordene que se tirara al suelo y pusiese sus manos sobre la cabeza, pero el comenzó a correr, por segundos me quede parado y justo cuando estaba por saltar una verja accione el gatillo metiéndole tres balas certeras en el cuerpo, cayo inerte del otro lado y cuando fuimos por él estaba totalmente tieso, aún recuerdo esos ojos llorosos mirándome con agonía, no es una memoria agradable pero siempre he creído que es necesario, eso me recuerda que a veces aunque algo parezca cruel es necesario, si lo hubiese dejado escapar quien sabe que podría haber sucedido, quizás habría llegado a la casa de una familia común y les habría tomado de rehenes, o habría matado a un niño, nada de eso se podía permitir, las decisiones que tomamos a veces son crueles, pero si con esa decisión logras salvar a una persona entonces es una buena decisión…aunque sea relativamente.
Apapache a Bryd dejando que se tranquilizara y omitiendo algunos gestos de dolor que me provocaba al estarme abrazando tan fuerte, finalmente cuando se separó de mi limpie una de sus lágrimas -Todo está bien- le susurre tratando de darle calma con ello y posteriormente le eche una mirada a Robin que estaba más allá, se notaba algo dolida y entonces señalándole a Bryd le di a entender que era mejor la apoyara, casi al instante arribaron al sitio los demás, eso me dio más seguridad, al menos de nuestro grupo nadie murió, aunque Caelyn no estaba aquí pero seguro seguía explorando los alrededores, lo que quedaba claro es que estaba batalla la ganamos, con cuantas muertes enemigas no lo sé, pero ahora mismo ya no me importaban, estaban muertos nosotros vivos y listo, nada de sentimentalismos, eso me lo guardaba para mi grupo, no para otros. Emily fue la que rompió el momento de silencio y haciendo un ademan con mi mano dije -Otro grupo de sobrevivientes- eso no lo podía ocultar ni mucho menos -La verdad es que pensé que este sitio estaba desierto, había demasiados caminantes afuera como para pensar que aquí adentro estaba gente viva- cosa que también fue cierta.
Suspire un momento viendo mis heridas -Tuve que luchar con unos de ellos- restregué mi rostro un momento recordando vívidamente las escenas pasadas -Llegue a la sala de observación y de repente un hombre me disparo, por suerte no logro darme, me cubrí y…- me detuve un momento, no podía simplemente decirles que los mate a todos porque no quería que nos echaran de este sitio, quizás si hubiésemos hablado pero…¿y si aun así nos hubieran atacado?, no, tome la decisión correcta…la tome -Les dije que éramos un grupo, que buscábamos refugio, pero el no quiso escuchar y siguió disparando, llegaron otras personas y ellas parecían más calmadas salvo el hijo del hombre, todos le pedían que nos escuchara, que podíamos ayudarnos pero él no entendió, un hombre se trató de acercar a mí para negociar y aquel sujeto le disparo a su propio compañero matándolo- abrí mis ojos viendo a los demás -Le disparo a otras personas y una mujer salió corriendo, pero el hijo de este hombre fue tras ella, no tuve más remedio que matar al que estaba armado y después a los heridos de muerte, todos sabemos que si no lo hacía ahora tendríamos caminantes aquí adentro- hice una seña tratando de restarle importancia.
-Cuando fui a buscar a la mujer la encontré muerta con un cuchillo en la nuca, busque al chico y este al verme escapo, lo busque y cuando di con él estaba siendo comida de unos caminantes en una cancha trasera- deje de lado aquel tema pues ahora mismo había cosas más importantes que resolver -Como sea, ya nada podemos hacer por los muertos, así que debemos ponernos manos a la obra, primero que nada todos pasaremos con Charlotte para que nos revise y cure las heridas en caso de tenerlas, después John y Emily, ustedes deben ir a revisar los alrededores, busquen a Caelyn, ella debería estar por ahí, Bryd, una vez que Charlotte termine tú le ayudaras a buscar comida y suministros médicos, si ese grupo sobrevivió tanto tiempo sin salir debe ser porque tenían bastantes- mire entonces a la pelirroja -Robin, tú me ayudaras a sacar los cadáveres de los muertos, no queremos que este sitio comience a apestar- espere que todos entendieran mis indicaciones.
Apapache a Bryd dejando que se tranquilizara y omitiendo algunos gestos de dolor que me provocaba al estarme abrazando tan fuerte, finalmente cuando se separó de mi limpie una de sus lágrimas -Todo está bien- le susurre tratando de darle calma con ello y posteriormente le eche una mirada a Robin que estaba más allá, se notaba algo dolida y entonces señalándole a Bryd le di a entender que era mejor la apoyara, casi al instante arribaron al sitio los demás, eso me dio más seguridad, al menos de nuestro grupo nadie murió, aunque Caelyn no estaba aquí pero seguro seguía explorando los alrededores, lo que quedaba claro es que estaba batalla la ganamos, con cuantas muertes enemigas no lo sé, pero ahora mismo ya no me importaban, estaban muertos nosotros vivos y listo, nada de sentimentalismos, eso me lo guardaba para mi grupo, no para otros. Emily fue la que rompió el momento de silencio y haciendo un ademan con mi mano dije -Otro grupo de sobrevivientes- eso no lo podía ocultar ni mucho menos -La verdad es que pensé que este sitio estaba desierto, había demasiados caminantes afuera como para pensar que aquí adentro estaba gente viva- cosa que también fue cierta.
Suspire un momento viendo mis heridas -Tuve que luchar con unos de ellos- restregué mi rostro un momento recordando vívidamente las escenas pasadas -Llegue a la sala de observación y de repente un hombre me disparo, por suerte no logro darme, me cubrí y…- me detuve un momento, no podía simplemente decirles que los mate a todos porque no quería que nos echaran de este sitio, quizás si hubiésemos hablado pero…¿y si aun así nos hubieran atacado?, no, tome la decisión correcta…la tome -Les dije que éramos un grupo, que buscábamos refugio, pero el no quiso escuchar y siguió disparando, llegaron otras personas y ellas parecían más calmadas salvo el hijo del hombre, todos le pedían que nos escuchara, que podíamos ayudarnos pero él no entendió, un hombre se trató de acercar a mí para negociar y aquel sujeto le disparo a su propio compañero matándolo- abrí mis ojos viendo a los demás -Le disparo a otras personas y una mujer salió corriendo, pero el hijo de este hombre fue tras ella, no tuve más remedio que matar al que estaba armado y después a los heridos de muerte, todos sabemos que si no lo hacía ahora tendríamos caminantes aquí adentro- hice una seña tratando de restarle importancia.
-Cuando fui a buscar a la mujer la encontré muerta con un cuchillo en la nuca, busque al chico y este al verme escapo, lo busque y cuando di con él estaba siendo comida de unos caminantes en una cancha trasera- deje de lado aquel tema pues ahora mismo había cosas más importantes que resolver -Como sea, ya nada podemos hacer por los muertos, así que debemos ponernos manos a la obra, primero que nada todos pasaremos con Charlotte para que nos revise y cure las heridas en caso de tenerlas, después John y Emily, ustedes deben ir a revisar los alrededores, busquen a Caelyn, ella debería estar por ahí, Bryd, una vez que Charlotte termine tú le ayudaras a buscar comida y suministros médicos, si ese grupo sobrevivió tanto tiempo sin salir debe ser porque tenían bastantes- mire entonces a la pelirroja -Robin, tú me ayudaras a sacar los cadáveres de los muertos, no queremos que este sitio comience a apestar- espere que todos entendieran mis indicaciones.
Leon O. Cole- Puntos de experiencia : 218
Fecha de inscripción : 20/09/2012
Re: Trama I [Grupo Errantes II]: Declaración de Guerra
Abracé con más fuerza a Leon hundiendo mi rostro en su pecho intentando callar con eso mi llanto. No me gustaba que me vieran llorar, no me gustaba sentirme débil, pero... Hace poco había acabado con la vida de dos personas, era algo que simplemente no podía olvidar tan fácil, pero estar con Leon... Hacia que en parte me reconfortara. Intenté calmarme por un momento y cuando la histeria de él momento pasó me sentí con fuerzas para soltar un poco a Leon.
Lo miré aún con algunas lagrimas en los ojos y luego de ello simplemente deje que sus manos limpiaran mis lagrimas, sintiendo al mismo tiempo suaves caricias en mis mejillas. Después de ello Robin se acercó y tomándome de su brazo caminé con ella. Así fue cuando noté la presencia de los demás miembros de él grupo, no sabía cuanto tiempo habían estado aquí, pero en parte me alegraba de verlos a todos bien, pero mi mirada nuevamente se posó en Leon notando que de todos él era el más herido. Mi preocupación aumento y más cuando el comenzó a relatar lo sucedido.
A decir verdad, a pesar de que escuché cada una de sus palabras algo en mi me hacía sentir inquieta, no sabía por que pero dejé que eso se esfumara, simplemente no quería saber más de lo que ocurrió. Solo quería olvidar y seguir adelante, quería que esto solo fuera un mal momento y estuviera enterrado en mi memoria por mucho.
Al final Leon volvió a cambiar de tema dándonos nuevas ordenes. Al parecer hoy pasaríamos la noche en este lugar. Por suerte -o eso pienso- a mi me tocó estar con Charlotte buscando los suministros tanto en medicamentos como en víveres, a lo cual solo asentí para esperar a que todos comenzaran su revisión esperando a ser la última para después comenzar con ella a buscar lo que Leon nos pidió.
Lo miré aún con algunas lagrimas en los ojos y luego de ello simplemente deje que sus manos limpiaran mis lagrimas, sintiendo al mismo tiempo suaves caricias en mis mejillas. Después de ello Robin se acercó y tomándome de su brazo caminé con ella. Así fue cuando noté la presencia de los demás miembros de él grupo, no sabía cuanto tiempo habían estado aquí, pero en parte me alegraba de verlos a todos bien, pero mi mirada nuevamente se posó en Leon notando que de todos él era el más herido. Mi preocupación aumento y más cuando el comenzó a relatar lo sucedido.
A decir verdad, a pesar de que escuché cada una de sus palabras algo en mi me hacía sentir inquieta, no sabía por que pero dejé que eso se esfumara, simplemente no quería saber más de lo que ocurrió. Solo quería olvidar y seguir adelante, quería que esto solo fuera un mal momento y estuviera enterrado en mi memoria por mucho.
Al final Leon volvió a cambiar de tema dándonos nuevas ordenes. Al parecer hoy pasaríamos la noche en este lugar. Por suerte -o eso pienso- a mi me tocó estar con Charlotte buscando los suministros tanto en medicamentos como en víveres, a lo cual solo asentí para esperar a que todos comenzaran su revisión esperando a ser la última para después comenzar con ella a buscar lo que Leon nos pidió.
Audrey O'Brien- Puntos de experiencia : 241
Fecha de inscripción : 20/09/2012
Localización : Sydney
Re: Trama I [Grupo Errantes II]: Declaración de Guerra
Poco después que Audrey y yo nos reuniéramos con Leon, llegaron los demás, estaban bien eso me tranquilizó, Loki corría detrás de ellos con la alegría que solo un animal inocente podría demostrar en un momento como este; se acercó a mí que seguía un tanto alejada del grupo y no pude evitar sonreír mientras acariciaba el suave pelaje de su cabeza. Me recargué en la pared que tenía más cerca y me dejé caer en el suelo para sentarme, Loki se recostó a mi lado. Entonces me preparé para lo que Leon tuviera que decir respecto a aquellas personas.
Los había enfrentado solo como había temido en un principio, no pude ocultar mi preocupación y esa angustia por no haber ayudado seguía, ya no solo por nosotros, sino también por ellos. “Qué tal si hubiéramos hablado?, ¿qué tal si hubiéramos estado todos y lo hubiéramos solucionado?, ¿se hubieran salvado?, ¿era necesario que murieran?” Un montón de preguntas que no me atreví a formular, él es nuestro líder, debemos confiar en él ¿no? Pero lo decía todo con una tranquilidad que me inquietaba, "¿cómo alguien podía tomar la vida de otra persona tan fácil?" Agité mi cabeza de un lado a otro "claro que no es fácil" intenté despejar todas esas dudas, no podía tenerlas, no ahora a estas alturas.
Cambió entonces de tema tan tranquilamente como lo había empezado y me puse de pie, asignaba tareas, yo aun seguía distraída en mis pensamientos que trataba de esfumar, por eso cuando me miró y llamó mi nombre me tomó por sorpresa. –¿Ah? S-si… claro, no hay problema. – Esforcé una sonrisa al final y me acerqué un poco más a él, esperando para continuar con la labor que se me había encomendado. Entonces caí en la cuenta que esta vez no solo limpiaríamos cadáveres putrefactos de caminantes, también estaban aquellos otros cuerpos que no hace mucho tiempo respiraban y se movían con normalidad, aquellos otros que pudieron considerar este espacio su hogar y que les habíamos quitado violentamente. Un súbito temblor me recorrió el cuerpo y apreté mis manos en un puño para lograrlo disimular.
Los había enfrentado solo como había temido en un principio, no pude ocultar mi preocupación y esa angustia por no haber ayudado seguía, ya no solo por nosotros, sino también por ellos. “Qué tal si hubiéramos hablado?, ¿qué tal si hubiéramos estado todos y lo hubiéramos solucionado?, ¿se hubieran salvado?, ¿era necesario que murieran?” Un montón de preguntas que no me atreví a formular, él es nuestro líder, debemos confiar en él ¿no? Pero lo decía todo con una tranquilidad que me inquietaba, "¿cómo alguien podía tomar la vida de otra persona tan fácil?" Agité mi cabeza de un lado a otro "claro que no es fácil" intenté despejar todas esas dudas, no podía tenerlas, no ahora a estas alturas.
Cambió entonces de tema tan tranquilamente como lo había empezado y me puse de pie, asignaba tareas, yo aun seguía distraída en mis pensamientos que trataba de esfumar, por eso cuando me miró y llamó mi nombre me tomó por sorpresa. –¿Ah? S-si… claro, no hay problema. – Esforcé una sonrisa al final y me acerqué un poco más a él, esperando para continuar con la labor que se me había encomendado. Entonces caí en la cuenta que esta vez no solo limpiaríamos cadáveres putrefactos de caminantes, también estaban aquellos otros cuerpos que no hace mucho tiempo respiraban y se movían con normalidad, aquellos otros que pudieron considerar este espacio su hogar y que les habíamos quitado violentamente. Un súbito temblor me recorrió el cuerpo y apreté mis manos en un puño para lograrlo disimular.
Robin Darcy- Puntos de experiencia : 249
Fecha de inscripción : 21/09/2012
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